Lo dijo al hablar en un foro de la Cumbre por la Democracia.
La secretaria del Tesoro de los Estados Unidos, Janet Yellen, afirmó en Washington que “en este momento, el mejor lugar para esconder y blanquear ganancias mal habidas es en realidad Estados Unidos y eso se debe a la forma en que permitimos que las personas establezcan empresas ficticias”.
Al hablar en un foro de la Cumbre por la Democracia, Yellen sostuvo que “en la imaginación popular, las capitales de lavado de dinero del mundo son países pequeños con historias de leyes financieras laxas y secretas. Desde principios del siglo XX, algunos estados han permitido que personas establezcan empresas fantasmas, sin revelar que realmente poseen, lo que llamamos el beneficiario. Pero esto está a punto de cambiar”.
En un comunicado del Departamento del Tesoro, la funcionaria detalló que “esta reunión es una muestra representativa notable de las democracias del mundo y, como hemos escuchado hasta ahora, compartimos un adversario común: la corrupción. Ya sea que se trate de funcionarios públicos o leyes que se aplican a todos, excepto a los que están bien conectados, la corrupción se burla de nuestras instituciones libres y justas. Eso es algo que todos los actos de corrupción tienen en común, pero hoy me gustaría centrar mis comentarios en otro vínculo compartido: el sistema financiero mundial”.
Más adelante, Yellen explicó que “la corrupción, después de todo, es solo una forma de alquimia financiera. Es la transformación del poder en dinero ilícito o del dinero ilícito en poder, y para catalizar esa transformación, los malos actores suelen necesitar un intermediario, un lugar para almacenar o blanquear sus ganancias mal habidas: una empresa fantasma, una transacción inmobiliaria, una compra de arte.
En esa línea, la secretaria del Tesoro manifestó que “combatir la corrupción no es solo el trabajo de los ministerios de justicia, de los fiscales y agentes del orden. También es el trabajo de los ministerios de finanzas, de reguladores financieros y expertos en desarrollo económico. Y creemos que nuestro ministerio de finanzas, en particular, el Tesoro de los Estados Unidos, debe desempeñar un papel de liderazgo. El sistema financiero estadounidense es la columna vertebral de la economía mundial. Enormes cantidades de fondos ilícitos pueden pasar, o aterrizar, en nuestros mercados. Pero el hecho de que los malos actores quieran blanquear dinero a través de Estados Unidos no significa que tengamos que ponérselo fácil”.
Luego remarcó que “hay demasiadas sombras financieras en los Estados Unidos que dan cobertura a la corrupción. Una medida crucial es exponer quiénes son los propietarios de empresas fantasmas y de otros fondos ilícitos. Hay corrupción aquí en casa. Especialmente cuando se trata de cómo la gente paga impuestos, o mejor dicho, cómo no lo hacen. El año pasado, se retuvieron más de 600 mil millones de dólares de las arcas públicas debido a nuestro sistema tributario quebrado, que efectivamente permite que los principales ingresos del país y las corporaciones más grandes se salgan con la suya con la evasión.
Finalmente, Yellen afirmó que “los Estados Unidos no pueden ser una voz creíble para un gobierno libre y justo en el extranjero si, al mismo tiempo, permitimos que los ricos infrinjan nuestras leyes con impunidad. La idea de democracia está ligada a la idea de los Estados Unidos. Si queremos que las instituciones libres prosperen en todo el mundo, primero debemos modelar cómo se ven en casa”.