Hay subas de hasta 16% en los ADR luego de un informe de Morgan Stanley, muy optimista con el sector pero en general con el futuro desempeño de la economía argentina. Los bonos dolarizados también subieron un nuevo escalón
Las acciones de bancos argentinos arrancaron la semana con subas espectacular en Wall Street. Un informe de Morgan Stanley salió con fuertes recomendaciones de compra y provocó rebotes todavía mayores en los ADR a los que ya venían acumulando en 2024.
El más beneficiado fue Banco Supervielle, con una suba de 15,8% promediando la rueda, Banco Macrosubía arriba de 13% en dólares, mientras que Grupo Financiero Galicia trepaba 9%. Este último papel encabeza las subas anuales de activos argentinos, ya que acumula un incremento de nada menos que 300%. Esto significa que un inversor que entró a principios de año multiplicó por cuatro.
La euforia de los inversores se trasladó también al mercado de bonos, donde se registraron nuevas subas, que llevaron al riesgo país a perforar por primera vez en más de cinco años el nivel de 700 puntos básicos, llegando a niveles de 680.
El informe de Morgan Stanley recomienda comprar acciones de bancos argentinos.
“Nuestra postura gira en torno a la normalización de la economía,
políticas gubernamentales e interés de los inversores en la clase de activos. Nos sentimos alentados por el progreso realizados en los últimos 12 meses gracias a recortes de gastos, aumentos de impuestos y reformas estructurales. Y las estimaciones de nuestro economista para 2025 y 2026 apuntan a una mayor desinflación, tipos de interés más bajos y tipos de cambio convergencia y un fuerte repunte del crecimiento del PBI”, agrega.
“El país -continúa Morgan Stanley- tiene las condiciones adecuadas para
respaldar un período de varios años de fuerte crecimiento del crédito. La penetración bancaria es extremadamente baja: Argentina es la tercera economía más grande de Latinoamérica, pero los préstamos al PIB es sólo del 12%, el más bajo entre las principales economías de la región”
Al mismo tiempo, agregan, “tiene muchas ventajas estructurales que pueden facilitar el proceso de bancarización y más rápido, incluyendo: una clase media numerosa y relativamente rica, alto acceso a servicios bancarios y balances bancarios bien capitalizados y subapalancado. Para los bancos que cubrimos, pronosticamos un crecimiento a una tasa compuesta de 35% en términos reales en los próximos tres años, que será la más rápida de la región”.