Permite trabajar, estudiar y vivir en ese país. Cuáles son los requisitos de inversión que exige el gobierno norteamericano y en cuánto tiempo se puede obtener, explicados por Brian Zirulnikoff. Audio completo de la entrevista, en este en este link.
Poner un pie en los Estados Unidos puede ser algo mucho más sencillo de lo que muchos creen. No todo pasa por obtener la “green card”, algo que puede llevar años. El gobierno norteamericano también dispone de una visa de “no inmigrante”, conocida como la E-2, que resulta mucho más accesible y otorga una gran flexibilidad para quienes quieren mudarse a ese país, empezar algún emprendimiento o incluso que los hijos continúen sus estudios allí.
Brian Zirulnikoff, director de Dynaxe Capital para América latina, detalló en qué consiste esta visa, qué inversión debe realizarse y cuál es el alcance. “Lo primero que cualquier persona debe hacer es definir una estrategia de inmigración y el presupuesto que posee. A partir de allí, dependerá de lo que uno quiera hacer, su situación familiar, si quieren vivir en Estados Unidos o incluso estudiar”.
La E-2 también es conocida como visa de inversor y resulta mucho más accesible que la “green card”. “Para acceder a esta visa el principal requisito que exige el gobierno de los Estados Unidos es efectuar una inversión sustancial, generalmente alrededor de U$S 150.000. Puede ser en algún emprendimiento nuevo o hacerlo en algún negocio en marcha”, explica Zirulnikoff.
Una vez realizada la inversión para acceder a la E-2, habrá que demostrar en forma regular que esa inversión sigue en marcha. “Con esta visa no tenés obligación de vivir en forma permanente en los Estados Unidos, es muy flexible. Pero para mantener el status migratorio es necesario que ese negocio continúe en marcha. De lo contrario se pierde el beneficio, porque es una visa de inversor y no de inmigrante”. “Mi recomendación es comprar un negocio en funcionamiento con ingresos y trayectoria. No hay obligación de contratar una determinada cantidad de empleados, por ejemplo –agrega- si es una compañía de comercio electrónico probablemente tenga muy pocos”
La visa E-2 es una de las más solicitadas por argentinos y latinoamericanos en general, porque otorga un importante grado de flexibilidad. Por ejemplo, la familia podría instalarse en los Estados Unidos, pero también seguir viviendo en su país de origen aún luego de haberla obtenido. Eso permite efectuar un “desembarco gradual”, lo que posibilita probar suerte o ver si todos los miembros del grupo familiar se adaptan a la nueva vida.
Otro aspecto relevante para tener en cuenta, explica el experto de Dynaxe Capital, es que la E-2 es una visa que permite poner dentro del mismo paraguas a todo el grupo familiar. Sin embargo, en el caso de los hijos sólo entran en ese status los menores de 21 años. Si uno de ellos es mayor de esa edad, entonces ya no estará alcanzado por esos beneficios y debería realizar el trámite por su cuenta, es decir de manera separada al grupo familiar.
“Ante esta situación, muchas familias se apuran en sacar la visa E-2 para asegurarle a los hijos la posibilidad de estudiar en los Estados Unidos antes de cumplir 21 años. Esto les da muchos beneficios, porque pueden ir al colegio o a la universidad pagando costos mucho menores que los estudiantes extranjeros”, concluye Zirulnikoff.