El costo de los CDS a un año llegó a comercializarse ayer a 166 puntos básicos, cerca de un récord histórico y ya se sitúan por encima de los niveles que alcanzaron en 2011 y 2013, momento donde el país también se situó al borde de la cesación de pagos por la misma situación.
El costo de las permutas de incumplimiento crediticio (CDS) de los bonos del Tesoro estadounidense ya supera el de algunos países emergentes ante el peligro de que el país norteamericano caiga en cesación de pagos el próximo 1 de junio, de no mediar un acuerdo entre el oficialismo y la oposición por el límite de deuda.
El temor en los mercados ante la probabilidad de que Estados Unidos caiga en default por primera vez en su historia elevó el costo de los seguros de los bonos estadounidenses a niveles superiores a los de países como Grecia, México y Brasil, incluso pese a que estos países tienen calificaciones crediticias inferiores a la nota máxima AAA que actualmente posee el país del norte, según la agencia de noticias Bloomberg.
“Es diferente a la situación de países como Grecia o México, donde la preocupación únicamente sería que el Gobierno caiga en default y nunca pague de nuevo o lo haga con un fuerte recorte”, afirmó John Caravan, analista de Oxford Economics.
Caravan se refiere particularmente a las consecuencias, aún desconocidas, que provocaría un default estadounidense en el sistema financiero global, consignó telam.
El costo de los CDS a un año llegó a comercializarse ayer a 166 puntos básicos, cerca de un récord histórico y ya se sitúan por encima de los niveles que alcanzaron en 2011 y 2013, momento donde el país también se situó al borde de la cesación de pagos por la misma situación.
Por su parte, los CDS a cinco años –generalmente considerados como una mejor referencia del riesgo a largo plazo- también subieron, pero cotizan por debajo de los 100 puntos.
La apuesta por los seguros es particularmente atractiva: en el caso de un default los tenedores de los bonos podrían recibir una ganancia que excedería el 2.400%, como resultado de la diferencia entre el valor del derivado y el de los bonos, que cotizan a un relativo bajo precio.
De todas formas, los analistas señalan que el costo de los seguros, al ser un mercado particularmente pequeño, no pueden traducirse en las posibilidades de un evento, en este caso el default estadounidense.
De hecho, el mercado aún cree que los legisladores estadounidenses alcanzarán un acuerdo a último momento y evitarán el default como sucedió en el pasado reciente.
Hasta el momento demócratas y republicanos no lograron acercar posiciones sobre el aumento del techo de deuda de Estados Unidos, condición necesaria para que el Gobierno no se quede sin fondos para cumplir con sus obligaciones.
Los republicanos se niegan a aprobar un incremento o la suspensión de este tope a menos que el Ejecutivo acepte fuertes recortes del gasto público.
En tanto, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, rechaza vincular los dos asuntos y los acusa de tomar de “rehén” a la economía del país.
La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, reiteró ayer que su área podría quedarse sin fondos tan pronto como el próximo 1 de junio, de no mediar un acuerdo.