El anuncio del Central de un mayor poder de intervención en el mercado cambiario generó un impacto favorable en los mercados. Las acciones argentinas en Wall Street, más flojas.
El efecto inicial de los anuncios de la mañana, previo a la apertura del mercado cambiario, tuvieron un efecto positivo, en línea con lo que buscaban tanto el Gobierno como el FMI.
El dólar cayó 3,6% a 4,3 pesos en el segmento mayorista, por debajo de los $ 46 que tocó sobre el cierre de la operatoria el viernes. Y en Banco Nación el minorista cerró a $ 45,30.
Ése era el objetivo central de las medidas anunciadas: descomprimir el mercado cambiario y frenar una espiral alcista que hubiera sido difícil de contener más tarde. Además, frenar la suba de la divisa resulta fundamental para que no se siga escapando la inflación.
Esta mayor tranquilidad cambiaria contagió positivamente al mercado de bonos, especialmente los de plazos más cortos que fueron los más afectados por el pánico de los inversores la semana pasada. El Bonar 2020 sumó 4,7% y el 2024 avanzó1,8%.
El Riesgo País mejoró 2,8% a 940 unidades.
Desde Balanz Capital señalaron que salir a defender el tipo de cambio es “positivo” para el mercado de bonos en moneda extranjera. Pero al mismo tiempo advirtieron que una pérdida de reservas puede generar dudas sobre la capacidad de repago futura que tenga la Argentina.
Las acciones argentinas que cotizan en Wall Street, sin embargo, no se terminaron de afirmar y cerraron con renovadas bajas. Banco Macro, por ejemplo, cayó 2,6%, mientras Irsa perdió 4,7%. Por el contrario, rebotaron levemente Grupo Financiero Galicia (+1,3%) y Supervielle (+0,6%)
Los inversores, en realidad, están a la expectativa de la marcha de las encuestas y si hay o no un repunte en la imagen de Mauricio Macri en los próximos meses que le permita ganar las elecciones. La estabilidad del dólar y una rebaja de la inflación son objetivos fundamentales detrás de los anuncios de hoy.
