El titular de la FED sostuvo que los riesgos de que la inflación elevada sea persistente han “aumentado claramente, por lo cual la política monetaria evolucionará en función a esto”.
El presidente de la Reserva Federal de los Estados Unidos (FED), Jerome Powell dijo en Washington que el organismo no puede asegurar que los aumentos de precios se desacelerarán en la segunda mitad del próximo año, como esperan muchos economistas”.
Powell habló ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes y señaló que “la mayoría de los economistas consideran que los picos de precios actuales, que han llevado la inflación al consumidor a un máximo de tres décadas, son en gran parte una respuesta a las persistentes interrupciones de la oferta y la demanda de la pandemia”.
“A medida que los estadounidenses pasan más tiempo en casa, han aumentado el gasto en muebles, electrodomésticos y computadoras portátiles. La creciente demanda de dichos productos, combinada con la escasez de piezas, ha provocado problemas en la cadena de suministro y precios más altos”, destacó el jefe de la FED en el Capitolio.
Powell sostuvo que los riesgos de que la inflación elevada sea persistente han “aumentado claramente, por lo cual la política monetaria evolucionará en función a esto”.
“La política se ha adaptado y seguirá adaptándose, hemos visto que la inflación más alta, y los factores que la están causando, son más persistentes”, expresó el funcionario, según reporta la agencia Bloomberg.
Actualmente, el banco central de EEUU tiene previsto completar su programa de compra de activos a mediados de 2022, según un plan anunciado a principios de noviembre para desacelerar las compras en US$15.000 millones al mes.
La próxima reunión del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) está programada para el 14 y 15 de diciembre, en ella podrían tomar una decisión para acelerar la reducción.
“La inflación que estamos viendo todavía está claramente relacionada con factores vinculados con la pandemia”, dijo Powell. “Sin embargo, también agregaría que se ha extendido más ampliamente en la economía y creo que el riesgo de una inflación persistente más alta ha aumentado claramente”, concluyó.