Los principales factores incluyen pagos de deuda, retiros de depósitos en dólares y la intervención cambiaria para contener la brecha.
A pesar de que el Banco Central (BCRA) adquirió más de u$s2.000 millones desde enero, las reservas internacionales cayeron cerca de 4.000 millones desde inicio de enero.
¿Por qué caen las reservas del BCRA?
En lo que va de febrero, el BCRA acumuló un saldo positivo de u$s825 millones en el mercado oficial de cambios. Sin embargo, las reservas se redujeron en u$s563 millones en la primera quincena, sin contar la compensación típica del primer día hábil del mes.
Uno de los factores clave fue el pago de u$s612 millones al FMI en concepto de intereses. Además, los depósitos en dólares del sector privado cayeron a cerca de u$s30.000 millones, alejándose del pico de u$s34.592 millones registrado al inicio del blanqueo.
Intervención en el dólar financiero
El mercado también registró la reaparición del BCRA en la bolsa, con un aumento en la compra de bonos para intervenir en el dólar MEP y el CCL. Según Portfolio Personal Inversiones, el volumen operado saltó de u$s67 millones a u$s135 millones entre lunes y martes, el mayor incremento desde enero.
Desde el 7 de enero, la entidad monetaria adquirió u$s2.228 millones, pero las reservas se desplomaron en u$s4.011 millones. Según la consultora 1816, esta caída se debe a pagos de deuda por u$s1.139 millones, una reducción de encajes por u$s1.864 millones y la intervención en el mercado financiero por u$s772 millones.
¿Por qué disminuyen los depósitos en dólares?
El retroceso de los depósitos en dólares y los encajes responde a tres factores principales:
- Retiros en efectivo en bancos.
- Pago de tarjetas por turismo.
- Uso de saldos en dólar MEP por importadores.
Paralelamente, crecen los créditos en dólares, un mecanismo que impulsa la compra de divisas por parte del BCRA en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC)
¿Podrá la Cuenta Financiera sostener el déficit de la Cuenta Corriente?
Desde fines de 2024, las reservas se sostienen gracias al blanqueo y al endeudamiento corporativo en dólares. No obstante, el déficit de la balanza de servicios se duplicó, mientras que el superávit comercial se redujo un 80%.
La consultora C-P estima que aún hay un remanente de más de u$s4.000 millones en capacidad prestable en dólares, pero este margen es finito. Por ello, el Gobierno busca alternativas para fortalecer las reservas, aunque hasta ahora solo aplicó una reducción temporal de retenciones.
El economista Amilcar Collante advierte que hasta junio la cuenta corriente podría beneficiarse de la cosecha gruesa y la baja carga de deuda. Sin embargo, a partir de julio, el escenario dependerá de un acuerdo con el FMI. “Si el acuerdo es ‘light’ y la Cuenta Financiera se queda corta, podríamos ver estrés cambiario antes de las elecciones”, señaló en diálogo con Ámbito FInanciero.