Por Bruno Consentino, CEO de C4B
A más de 10 años de la llegada de la facturación electrónica como tecnología a nuestras vidas, su evolución comienza a materializarse. Se trata del fin del intercambio de las mismas por email, portales, o archivos, y su vínculo inevitable con los pagos.
Apenas comenzaba a girar la rueda allá por el año 2007, tanto nosotros, embebidos en la problemática al timón de FacturaciónWEB (plataforma online para la generación y envío de facturas electrónicas para pequeños contribuyentes), como otros proveedores de este tipo de servicios, comenzamos a comprender que el potencial de esta tecnología no se terminaba en la emisión: una factura electrónica está compuesta por datos, y éstos debían ser de utilidad para ambas partes de la operación comercial.
Hoy inclusive, la mayoría de las empresas asumen costos que podrían no existir. Éstas reciben facturas por email en formato PDF, teniendo que imprimirlas, agruparlas, controlar y tipear los datos en sus sistemas, para luego archivar.
Otras más grandes o “evolucionadas” exigen a sus proveedores la carga manual de las mismas en diferentes portales, teniendo luego que, de todas maneras, controlar dato por dato y recibir el papel, entre otros procesos manuales.
Se estima un costo de U$S 7 promedio por el proceso de facturas de compras, y que cada empresa proveedora mensualmente debe acceder a más de 5 portales de diferentes clientes para dejar su propia factura de ventas.
Por otro lado, la problemática se acentúa debido a los pagos. Éstos por lo general tienen vida propia y paralela a los procesos de facturación y lógicamente requieren de ser conciliados de manera manual o semi manual.
Es muy probable que todos se sientan parte de esta problemática, y fue por eso que creamos C4B (Community4Biz), una plataforma en línea que sincroniza en tiempo real a entidades compradoras y proveedoras, utilizando la facturación electrónica como canal.
Estas plataformas permiten que cualquier factura de ventas, sin importar el sistema desde el cuál fue emitida, pueda ser recibida en tiempo real y gestionada por el destinatario (el comprador) evitando por completo la utilización del email, papel, carga manual de datos y demás procesos físicos para ambas partes. Nuestra plataforma cuenta a su vez con un medio electrónico de cobranzas y pagos (MeCoPa), que permite además el pago y cobro de facturas en un mismo proceso.
Desde la perspectiva de las compras de cualquier empresa o profesional, esta revolución, entre muchas otras cosas, implica poder recibir todas las facturas de proveedores en un único canal, obtener información de compras en tiempo real, efectuar controles automatizados, traducir conceptos, pagar, conciliar, e imputar en el ERP, todo en uno.
Desde las ventas, con el solo hecho de emitir facturas, éstas pueden ser capturadas por el destinatario, cobrada, conciliada, e imputadas independientemente de qué sistema, aplicación, medio de pago o banco utilicen.
Por una cuestión lógica, quienes inician la revolución son las grandes empresas buscando eliminar procesos asociados a la recepción de facturas de múltiples proveedores que hasta el momento se entendían como “ineludibles”. Muchas de éstas tienen miles de proveedores o prestadores, lo cual implica un costo administrativo enorme.
Esta relación hasta hoy se basa en “portales” de presentación de facturas y otros documentos, en los cuales sus proveedores deben cargar manualmente las facturas, lo cual exige sostener estructuras de control “a ojo”, de recepción, organización, tipeo de datos, archivado de papeles, y otros procesos de pago y conciliación. Otras exigen la carga de archivos que de todas maneras exigen gestión manual.
De la mano de C4B éstas pueden simplemente “capturar” la factura que se les destina, en el momento en que es emitida, aplicar controles automatizados, pagar, conciliar e imputar todo en el ERP, y sin exigir ningún proceso engorroso para el proveedor, ya que éste sólo factura desde su propio sistema para luego recibir el dinero en su cuenta, el resto es trabajo de C4B.
Lo interesante es que, si bien la revolución la inician las grandes empresas, quienes son sus proveedores también pueden replicar el esquema hacia su propio ecosistema económico, y así sucesivamente, sin necesidad de desarrollar o invertir en nada.
Este es motivo de charla cada vez más frecuente, pero además es inminente y tendencia mundial. Un día no muy lejano dejará de ser importante qué sistema de gestión, facturación y ventas dispongan las empresas y comercios, cuál sea su banco, o qué aplicación de pagos utilicen sus clientes. Todo en una operación comercial, seguida de su correspondiente control y gestión, estará automatizado. Sólo será importante tener un dispositivo electrónico integrado a mano. Conectar a todos es el rol con el que C4B servirá a la economía digital en la que estamos entrando. La facturación y los medios de pago electrónicos cumplirán un rol fundamental.