La reducción se dio tanto para los bonos en dólares como en pesos. La calificadora cree que aun luego de las elecciones presidenciales la Argentina no recuperará el acceso a los mercados crediticios
Con fuertes advertencias sobre la situación económica y financiera que atraviesa el país, Fitch rebajó la calificación de la deuda argentina a CCC-. De esta forma, dejó la nota de los bonos en dólares prácticamente al borde del default.
La rebaja de la calificación refleja, según indicó Fitch, “los desequilibrios macroeconómicos profundos y una posición de liquidez externa altamente restringida”. Esta situación, describió, “socavará cada vez más la capacidad de pago a medida que el servicio de la deuda en moneda extranjera aumenta en los próximos años”.
También hay críticas al acuerdo de Facilidades Extendidas que está en marcha con el FMI: “No ha demostrado ser un ancla sólida para las mejoras de políticas para generar reservas internacionales y mejorar las perspectivas de recuperación del acceso al mercado”. Agrega que “no está claro si esto será posible lograrlo en algún momento como resultado de las próximas elecciones de 2023, aumentando los riesgos de un eventual evento crediticio”.
Fitch también rebajó la nota de la deuda en pesos, indicando que también se encuentra comprometida la capacidad de pago en moneda local. “Una gran carga de vencimientos en pesos que vencen el próximo año podría ser difícil de refinanciar en caso de un mercado preelectoral nervioso”.
Por otra parte, indicó que la meta de bajar el déficit fiscal a 1,9% es desafiante: “No se observan reformas estructurales mas allá de una reducción de subsidios, que implica un ahorro de 0,5% del PBI. Además la elevada inflación beneficia a las cuentas actuales ahora, pero puede complicarlas en el futuro por la indexación del gasto”.