La ralentización en el precio de los alimentos frescos contribuye a mantener el IPC por debajo de ese umbral.
El IPC Ecolatina para el Gran Buenos Aires mostró en la primera quincena de julio un crecimiento del 6,5% con relación al mismo lapso de junio. De esta manera, sostuvo la desaceleración registrada desde la segunda quincena de mayo.
La moderación responde a un menor crecimiento de alimentos frescos, sumado a que en julio coinciden una menor cantidad de aumentos de la categoría Regulados que en los dos meses previos.
En cuanto a las categorías, el alza estuvo liderada por los Estacionales, donde la aceleración en Turismo (+27,9%) producto de una suba estacional por el receso invernal fue moderada por la caída en Frutas y un menor crecimiento en Indumentaria exterior. La inflación Núcleo (+6,6%) desaceleró 0,6 p.p. con relación al avance que había mostrado en la primera quincena de junio, período en el cual había desacelerado 2,1 p.p.
El menor crecimiento se verificó en Regulados (+5,2%), donde aumentaron Prepagas (+8,5%), Educación formal (+9,8%), Cigarrillos (+12,9%), Telefonía (+6,1%) y Colectivos y trenes (+8,0%).
El capítulo de Alimentos y bebidas (+5,3%) desaceleró 1,6 p.p. respecto a la primera quincena de junio, principalmente por un menor crecimiento en Carnes (+1,6%) y una caída en Frutas (-0,5%). Los productos de Consumo Masivo -empaquetados- treparon 6,5%, mostrando una desaceleración de 0,4 p.p respecto a la 1Q de junio.
En cuanto a los capítulos, los que más crecieron fueron Esparcimiento (+11,8%), impulsado por los aumentos en turismo y servicios de esparcimiento ante el inicio de las vacaciones de invierno; Educación (+10,7%), traccionado por aumentos en colegios (tanto en PBA como en CABA) y artículos de librería y libros; y Salud (+9,4%), donde incidieron los aumentos en prepagas (+8,5%) y medicamentos (+10,0%).
Para la segunda quincena, esperamos una desaceleración marginal del índice, que lo dejaría para el promedio mensual en la zona del 6,2%.