Su CEO, Atilio Velaz, contó la transformación tecnológica de la compañía que se encarga de todos los pagos del sistema financiero, incluyendo bancos y billeteras digitales.
El hashtag más utilizado por la compañía lo dice todo: “Hacemos que suceda”. Coelsa es la empresa que está detrás de todas las transacciones electrónicas diarias que ocurren en la Argentina. Pero el objetivo es que su presencia pase desapercibida. Para eso trabaja un grupo de apenas cien personas, encargadas de aceitar la ruta para que millones de pagos y transferencias lleguen a destino a tiempo.
Aunque parezca fácil expresarlo, la tarea es sumamente compleja. Sobre todo a partir del aumento exponencial que se produjo con la pandemia y la necesidad de evitar el contacto físico. El concepto clave detrás de todo es “interoperabilidad”. A partir de ello fue posible, por ejemplo, que las cuentas bancarias se interconectaran con las billeteras digitales. Y dentro de muy poco los comercios podrán cobrar desde todas las billeteras del mercado a partir de un único código QR.
Quien tiene la máxima responsabilidad dentro de Coelsa, cuyos accionistas son 19 bancos del sistema local, es Atilio Velaz, un ejecutivo de más de 30 años de trayectoria en banca. Pasó por Banco Río y en Citibank estaba a cargo del negocio de cash management para Argentina, Uruguay y Paraguay. Luego recaló en Interbanking y más tarde en BBVA Francés, reportando tanto a la oficina local como a Madrid.
“Soy presidente de Coelsa desde 2018, pero el año pasado tomé el rol de CEO. Participé una terna con otros candidatos y presenté un plan de desarrollo a diez años. Fui elegido por el directorio por unanimidad”, señala Velaz desde las nuevas oficinas de la compañía en Catalinas. Ya el nuevo “lay out” de los dos pisos que posee Coelsa marca claramente hacia dónde apuntan. Se trata de espacios completamente abiertos, con muchos detalles modernos y un fuerte impulso al trabajo en equipo. Muy parecido a lo que se puede encontrar en una compañía de alta tecnología o en una fintech y bastante alejado del modelo bancario tradicional.
“Somos una empresa de tecnología al servicio de lo que precisa el sistema financiero. Nuestro rol es facilitar la interoperabilidad, que es cuando más se crece y más se evoluciona”, explica Velaz, que además definió con su equipo cómo será la nueva modalidad laboral de la compañía. “A partir de las encuestas decidimos que haya dos días por semana de presencialidad y los otros tres serán de trabajo desde la casa, especialmente los viernes. Pero lo más importante es ofrecer una carrera atractiva, proyectos y beneficios, porque el mercado laboral en este segmento está muy competitivo”. Trabajan 100 empleados, la gran mayoría de alto perfil técnico y elevada productividad. Y algunos fueron “reconvertidos”, incluyendo el rol de secretaria.
El ejecutivo realizó la entrevista desde las flamantes oficinas de la empresa, todo un signo de vuelta a cierta “normalidad”. Durante la charla, explicó en forma coloquial en qué consiste el servicio de Coelsa. “Detrás de toda transacción financiera estamos nosotros, salvo cuando se paga con efectivo. Y aquí entran no sólo los bancos, también las fintech o el pago de planes sociales y jubilaciones. En todos los casos estamos involucrados nosotros”. “La clave –agrega- es innovar. Se expanden muy rápido los volúmenes y lo mismo debe suceder desde el punto de vista tecnológico”.
El crecimiento de transacciones que pasan por Coelsa es asombroso. Los echeqs, por ejemplo, muestran una tasa de crecimiento del 3.800% y no les falta mucho para superar a los cheques físicos. Hace dos años prácticamente era un instrumento que si bien existía no era casi utilizado.
Otro dato sorprendente es que ya un tercio del total de transacciones del sistema comienzan o tienen como destino una Clave Virtual Uniforme (CVU), es decir una cuenta proveniente de una billetera digital. Se trata de una expansión notable, pasando de 2 millones a 17 millones en apenas un año y medio. En los bancos hay 95 millones de cuentas (prácticamente dos por habitante), pero una proporción importante no tiene uso o sólo se utiliza para la extracción de efectivo.
Además, en junio se registró un nuevo récord de transacciones desde CVU, es decir billeteras digitales, totalizando 33 millones.
Velaz asegura que la compañía está en plena etapa de inversión tecnológica y ajuste de procesos para dar respuestas inmediatas y reducir el margen de error en las transacciones. Ahora tiene un enorme desafío por delante: Coelsa se encuentra en plena implementación de la modalidad de pago conocida como “Transferencias 3.0” en la Argentina –junto con Red Link y Prisma Medios de Pago- que arrancó el año pasado y debe estar en pleno funcionamiento en noviembre próximo.
El esquema permitirá que se realicen –entre otras funcionalidades- transferencias inmediatas de cuenta a cuenta a la hora de efectuar una compra en un comercio. Para el vendedor la gran ventaja es que recibirá los fondos en su cuenta automáticamente y una reducción de los aranceles. Pero al mismo tiempo también deberá estar en pleno funcionamiento el código QR interoperable, que permitirá pagar en forma indistinta con cualquier billetera en cualquier local. “Todo lo que ayude a combatir el efectivo y reducir los costos es bienvenido, por eso somos grandes promotores”, señala Velaz.
El CEO de Coelsa aclara por dónde pasa el objetivo de los planes a futuro: “La empresa se autosustenta. Nuestro plan pasa por la tecnología y la eficiencia. No tenemos como principal búsqueda la rentabilidad, pero sí que nuestros accionistas y todo el sistema financiero en general puedan realizar transacciones de calidad y a bajo precio”.
