Road Show efectuó un relevamiento entre las principales competidoras. Desde shoppings, pasando por villas de emergencia y ferias, cuáles son los lugares elegidos para satisfacer al público y comercios en forma paralela
Los cajeros no bancarios comienzan a ganar terreno entre los usuarios. La mayoría se encuentran en shoppings y comercios, pero también crece el parque en ferias y villas de emergencia, precisamente donde los bancos tienen escasa presencia. Entre las tres empresas que lideran el negocio todavía no llegan a 400 sobre un parque cercano a 18.000, pero la penetración va en aumento.
Por su cercanía, seguridad, confianza y practicidad, muchas terminales no bancarias funcionan las 24 horas brindando soluciones al instante ante las “urgencias” de los usuarios al momento de disponer de efectivo en mano.
Aunque resulte paradójico, si bien estos cajeros fundamentalmente entregan efectivo, al mismo tiempo tienen gran utilidad para la inclusión financiera. En algunos casos reemplazando la nula presencia bancaria en determinadas zonas del país, en otros casos ofreciendo a los comercios a descargar efectivo en estas terminales y ahorrando costos logísticos, y en otras a través de pagos de factura o incluso la posibilidad de acceder a un préstamo.
Aunque los medios electrónicos de pago siguen en crecimiento, el efectivo sigue reinando en la Argentina y llevará tiempo cambiarlo. Mientras tanto, brindar soluciones que permitan un menor traslado de los pesos y al mismo tiempo brindar opciones de pago digitales desde los cajeros son importantes atributos para hacer crecer el negocio de cajeros no bancarios.
¿Dónde están ubicados? ¿Qué servicios ofrecen? ¿A qué público apuntan? ¿Cómo hacen para convivir frente a las billeteras virtuales? ¿Qué los diferencia de los cajeros bancarios?
Roadshow realizó un relevamiento entre las tres compañías que pisan más fuerte en el negocio, quienes explican cuáles son sus principales ventajas, qué los diferencia de la competencia y de los tradicionales cajeros automáticos de los bancos.
ORUS
Prosegur Cash es una de las líneas de negocios de Prosegur, la empresa que brinda servicios de seguridad privada, traslado y custodia de caudales En 2021, creó la marca ORUS en Argentina, la red de cajeros automáticos de Prosegur.
Primero, comenzaron instalando una terminal dentro la empresa. La prueba piloto resultó un éxito y luego comenzó a ofrecer el servicio a sus clientes.
“Es un servicio de recaudación electrónica del efectivo. De alguna manera resuena mucho con la compañía que nos dedicamos a hacer recaudación de efectivo de manera tradicional y ahora a través de la tecnología”, explica Hernán Ball, Gerente de Transformación de Producto de Prosegur Cash.
Los cajeros ORUS operan en municipalidades, supermercados, estaciones de servicio y aeropuertos. Hasta el momento, hay 50 cajeros operando en diez provincias, de los cuales, la mayoría están operativo las 24 horas. La empresa apunta a la instalación de unas 250 terminales para 2024.
En el caso de las municipalidades, como la de San Carlos, la recaudación de efectivo de estos municipios se carga dentro del cajero automático. “Cuando el dinero se dispensa se lo acreditamos en la cuenta bancaria de la municipalidad”, indica Ball.
Al igual que las otras compañías, los cajeros ORUS están disponibles para cualquier usuario nacionalidad argentina o extranjera. Se puede utilizar con tarjeta crédito o de débito de la red Link o Banelco, nacional o internacional, como si fuera cualquier cajero bancario. Prosegur no posee tarjeta propia para operar.
“Como parte de nuestra política y en materia de estrategias nosotros no cobramos ningún tipo de comisiones al usuario final”, subraya Ball.
Prosegur se ajusta a las normativas del BCRA. “Cuando permitieron que empresas no bancarias tuvieran el acceso a desarrollar una red propia ya teníamos el equipo de mantenimiento técnico. Son las personas que monitorean si el cajero tiene dinero, si está conectado, si algún modulo se rompió, entre otras cosas. Ya teníamos toda la estructura de recursos humanos funcionando hace años. Entonces vimos esa oportunidad”, revela el ejecutivo.
La línea de cajeros no bancarios ORUS es una rama más de la compañía, en línea con su servicio de brindar seguridad en el traslado de caudales. “Hacemos recaudación con camiones, con personal”, detalla Ball, y completa: “Esto es parecido pero se reemplaza el camión por el cajero automático. El dinero que está ahí dentro lo retiran los usuarios. Todo ese dinero que va saliendo, que se extrae, se va validando y todo ese dinero se acredita al día siguiente en la cuenta bancaria del cliente”.
Actualmente, el 70% de los cajeros ORUS se encuentran en el interior y el 30% restante, en el AMBA. Como parte de la estrategia de Prosegur, están ubicados en zonas poco frecuentes, donde el usuario necesita el dinero en efectivo. Para la empresa, su servicio le agrega valor a la población para resolver el problema ante la escasez de dinero.
“A nivel costos operativos y logísticos es más caro tener un cajero en provincias como Mendoza, Bariloche, Catamarca o Formosa pero también nosotros vemos esto como una oportunidad”, comenta Ball.
“Cuando ponés un cajero en estos lugares, es un acuerdo a largo plazo entre las partes. Nos pasó en lugares o límites entre La Rioja y Córdoba, donde tienen un pedido de cajeros desde hace décadas y nadie los instala. De repente, ponés ese cajero y ves al público súper contento, a la población, al intendente, al cliente que puede ser una estación de servicio o la misma municipalidad, o un supermercado. Todos están en la misma sintonía. Pero cuando lo ponés en otro lugar hay mucha gente pero también hay otros cajeros, no agregás tanto valor, no resolvés un problema”.
Los cajeros ORUS son cash dispenser, es decir entregan efectivo. Hay tres funciones que están habilitadas:
- Extracción de efectivo de tu caja de ahorro o cuenta corriente.
- Consulta de saldo
- Adelantos en tarjeta de crédito. En caso de no contar con dinero en la caja de ahorro, se puede hacer un adelanto en la tarjeta. “Metés la tarjeta de crédito y por ejemplo, te dice ‘tenés 30.000 pesos de adelanto habilitados’. Entonces, retirás ese dinero. Son las tres funcionalidades que tenemos, explica Ball.
Estos dispensadores de efectivo operan a través de Red Link. El límite de extracción es de 15.000 pesos, el mismo de cualquier cajero no bancario, de acuerdo a las normas del BCRA.
“Este monto quedó atrasado. Como crítica constructiva, el límite quedó corto. Cuando empezamos la operación hace dos años era la misma cifra. Con una inflación de 95%-100% tendremos que tener otros valores”, reconoce el Gerente de Transformación de Producto de Prosegur Cash.
Según datos de la empresa, se realizan unas 3.500 operaciones diarias aunque el número puede variar si se trata de cajeros que funcionan las 24 horas ubicados en sitios donde hay mucha concurrencia.
Un tercio de las transacciones se realizan después del horario laboral, desde las 18 horas hasta 9 de la mañana del día siguiente.
Además, los usuarios de los cajeros ORUS retiran un promedio de 7.500 pesos diarios aunque, por la inflación, el monto va creciendo hasta llegar al tope de los 15.000 pesos como máximo. Tampoco se cobran comisiones a los clientes.
Prosegur brinda un servicio totalmente llave en mano. “Esto nos diferencia no solamente de los bancos sino de nuestros pares de cajeros no bancarios”, asegura Ball, y resalta: “Normalmente los cajeros no bancarios son cargados por el propio cliente. En nuestro caso, aproximadamente el 50%-60% del parque los cargamos nosotros”.
Cuando un cliente posee un cajero en una determinada ubicación asume la responsabilidad de recargarlo con dinero en efectivo. ¿Qué ocurre cuando el cliente avisa que esa zona es insegura y no se anima a hacer la carga de dinero?
“En ese caso brindamos ese servicio adicional: vamos con el camión y con el personal como lo hacemos con cualquier cajero bancario, y lo cargamos nosotros. Esa posibilidad de cargar el ATM la tiene únicamente Prosegur. Ponemos el cajero y lo cargamos con nuestro personal”, afirma.
Aunque la norma del BCRA no lo exija, Ball explica que los cajeros ORUS poseen un sistema de seguridad con sensores y alarmas que tienen reporte a la Policía local y al centro de monitoreo de Prosegur. “Eso también es un diferencial de forma tal que el dueño del comercio se sienta más tranquilo al poner un cajero. Ante cualquier intento de vandalismo saltan los sensores, reporta a la policía y en 5 minutos están ahí. La Policía tiene prioridad de monitorear el cajero”, detalla el Gerente de Transformación de Producto de Prosegur Cash
Los cajeros ORUS se instalan 100% en comodato. “Cuando el cliente está interesado ya tenemos el cajero, contamos con el convenio con la empresa de alarmas. Además, le ofrecemos el servicio de aprovisionamiento de cargar el cajero”, completa.
Otra de las diferencias es que Prosegur también ofrece un servicio de instalación de sus cajeros ORUS. Como los cajeros ocupan un espacio físico de unos cinco metros cuadrados, la compañía dispone de personal adecuado para hacer remodelaciones o una obra.
“Una de nuestras fortalezas es el posicionamiento de la compañía en la mente del consumidor. Prosegur es una empresa de seguridad, brinda tranquilidad a quienes lo utilizan. Tenemos un muy buen volumen de transacción en promedio por cajero. La gente rápidamente confía en la marca y empieza a operar sabiendo que es una empresa grande y confiable”, explica Ball.
Prosegur posee otra ventaja respecto de los cajeros bancarios. “Como tenemos personal propio controlándolo, estamos permanentemente viendo que el cajero esté en funcionamiento. Somos una empresa de transporte de caudales y en la medida que el cajero esté quedándose sin dinero tenemos la posibilidad de coordinar y cargar el cajero. Esto también forma parte de la diferenciación”.
Si el cliente está interesado en tener un cajero ORUS, primero la empresa analiza la zona antes de su instalación, para brindar seguridad tanto al cliente como a sus potenciales usuarios. Prosegur cuenta con especialistas en seguridad vial para hacer la verificación del lugar, validar el local y el nivel de soporte técnico que se pueda practicar, para que el cajero pueda recibir su correcto mantenimiento. De esta manera, se asegura el funcionamiento de sus cajeros en sitios donde previamente ha explorado, evitando robos, deterioros o situaciones de vandalismo que suelen ocurrir cuando se instalan cajeros en forma indiscriminada, sin ningún análisis previo.
“Fuimos la primera empresa que pusimos cajeros automáticos en La Salada, pusimos dos cajeros en el predio. Antes, hicimos un acuerdo con la empresa: se hizo una estructura especial donde están colocados, se hizo un análisis del recorrido del camión, un análisis de cómo tienen que estar amurados y muchísimo trabajo previo para que eso pudiera suceder”, cuenta Hernán Ball.
“Esos cajeros funcionan muchísimo ya que viene gente a comprar de todas partes, de todas las provincias. Vienen con la tarjeta, retiran efectivo ahí y terminan haciendo las compras. Pusimos un cajero y la demanda de dinero era tan grande que seis meses después tuvimos que poner un segundo cajero. Según la demanda, tendremos que poner uno más”, completa.
Cabe señalar que los cajeros no bancarios están habilitados para cobrar el denominado surcharge o cargo al usuario. “El espíritu de la compañía es lograr muchas transacciones. Por eso, como política no le cobramos al usuario”, añade Ball.
Sin embargo, desde la empresa aseguran que este cargo podría cobrarse en algún caso específico, donde la instalación del cajero fuera prácticamente inviable, algo que ocurre solamente en el 5% de los cajeros.
“Por ahí lo cobramos durante un tiempo y después lo deshabilitamos. Hay que ver cómo madura la cantidad de transacciones que es lo que vivimos”.
Octagon
Es una empresa nacional que integra de la red de cajeros de ATM. Comenzó a operar en 2021 y abarca 17 provincias en distintos lugares y ciudades. Cuenta con 120 cajeros sobre un total de 18.000 terminales en todo el país.
Los cajeros están instalados en las estaciones de servicios YPF, Shell y Axion, en centros comerciales como Paseo Pilar, Pilará, Torres del Sol, Remeros, y shoppings pertenecientes al Grupo IRSA como Alto Palermo, Abasto, Alto Avellaneda, Patio Bullrich, Paseo Alcorta, Distrito Arcos, y el Alto Comahue, entre otros, y en los shoppings en la zona Sur en Quilmes y en San Justo. Por primera vez, instalaron un cajero no bancario en un supermercado en el shopping Soleil.
Esta red funciona las 24 horas, como el caso de las estaciones de servicio. También opera según el horario de los comercios y shoppings adheridos. En la página web de la red ATM está disponible un mapa para con todos los cajeros Octagon para localizarlos.
Bajo la modalidad dispensadores, los usuarios de los cajeros Octagon pueden hacer extracciones y control de saldos. También cuenta con el modelo multifunción para efectuar depósitos, siendo esta última opción una novedad respecto al sistema de los cajeros no bancarios, que por lo general solo permite hacer extracciones de dinero y control de saldos.
“Uno de nuestros diferenciales más importantes es que tenemos un cajero que permite -más allá de la extracción- el depósito del dinero”, explica Begoña Pérez de Solay, Gerente General de Octagon.
“La posibilidad de depositar nos permite que la carga del cajero para el comercio sea mucho más sencilla. Por otro lado, de algún modo nos resuelve el tema de la tesorería. A partir de esos depósitos, el cajero toma esos fondos. Tenemos una plataforma de gestión que permite visualizar ese depósito, quién fue el usuario que lo hizo, en qué denominaciones de billetes ingresó ese dinero, se acomoda y queda listo para que venga el usuario y haga una extracción”, agrega Pérez de Solay.
Tampoco hace falta tener una tarjeta especial, sino que el cliente podrá operar con sus tarjetas de crédito o débito VISA o Mastercard de cualquier banco. Puede ser local o internacional, como si fuese un cajero convencional.
Según datos de la empresa, los usuarios realizan unas 70.000 transacciones mensuales en sus 120 cajeros. El nivel de operaciones puede variar según la concurrencia del público como en el caso de los shoppings. Sin embargo, el uso de los cajeros Octagon continúa en aumento. Para este año, la compañía prevé llegar a los 500 cajeros no bancarios en todo el país.
Los comercios adheridos tienen la ventaja de poder cargar dinero en los cajeros Octagon. “Achicamos el plazo y el costo logístico: el efectivo que carga la empresa es el que luiego retira el público. Todo se simplifica”, subraya la ejecutiva.
¿Cómo hacen los cajeros no bancarios para convivir en un mundo donde el uso de las billeteras virtuales y los pagos vía QR están a la orden del día y el dinero tiende a desaparecer?
“Alrededor de 900 mil millones de pesos se extraen de un cajero automático frente a los 600 mil millones de pesos que se extraen por ventanilla. Esto, comparado a lo que se hacen en pagos electrónicos, es una cifra enorme”, argumentó Pérez del Solay.
El uso del efectivo sigue siendo la modalidad preferida. Extraer dinero del cajero es rápido, es fácil, además de que el sistema de extracción es sólido en Argentina y los billetes están nominados. En ese sentido, los cajeros no bancarios ayudan al usuario a sacarlo de un apuro, de una urgencia.
Según la disposición del Banco Central de la República Argentina (BCRA), todos los cajeros no bancarios cuentan con un límite de extracción de 15.000 pesos en efectivo por día. Las empresas que operan con este servicio consideran escaso el monto de retiro si se lo compara con una inflación promedio del 100% anual, y esperan que se actualice ese límite diario.
En cambio, los cajeros automáticos de los bancos permiten retirar entre 50.000 a 90.000 pesos, según cada entidad, incluyendo los esquemos “Extra Cash”, que permiten retirar dinero en un supermercado, farmacia o estación de servicio directamente en la caja y con tarjeta de débito.
Los usuarios de los cajeros no bancarios eligen en forma creciente estas terminales por su cercanía, por comodidad y practicidad. Pueden estar en shoppings, comercios, supermercados o estaciones de servicios, y siempre disponen de dinero, ya que son los comercios adheridos los encargados de la recarga del cajero.
Una vez conocido el sistema, los clientes vuelven a realizar una transacción y eso genera mayor confianza. Para las empresas, lo más importante es la circulación del efectivo. Se calcula que el usuario que ya conoce el sistema realiza entre 2 y 4 extracciones de dinero por mes.
Los cajeros Octagon no cobran comisiones a los clientes o usuarios. En todo caso, lo hará el banco emisor si es que el usuario utiliza otra red de servicios bancarios. Como si fuera cualquier cajero automático.
“Le cobramos el interchange (intercambio) a la entidad emisora. Tenemos las licencias de adquirencia de VISA y Mastercard, por lo que podemos cobrar ese concepto, pero nunca al usuario que retira el dinero”, afirma Pérez del Solay.
La compañía además se encarga de la instalación y mantenimiento de los cajeros. Adicionalmente, ofrece un tablero de gestión en tiempo real donde el comercio adherido puede controlar la operatoria de su cajero.
Además, Octagon monitorea la red para garantizar que los cajeros estén en línea y en condiciones de brindar servicio a los usuarios.
“El objetivo de la compañía es distribución y capitalidad con un bajo costo de operación. Brindamos un canal de distribución de bajo costo en el que podés realizar diversas transacciones a partir de una transacción básica de una extracción y una transacción básica de depósito”, concluyó Pérez del Solay.
Pago24
Es una de las unidades de negocio de TRASA, una compañía con 20 años de trayectoria en el rubro servicios. Comenzó vendiendo tarjetas de telefonía para hacer llamadas y más adelante se transformó en una plataforma de recargas de todo tipo: para celulares, de recarga prepaga, y para recargar tarjetas de transporte (SUBE), su principal negocio. Actualmente cuenta con más de 15.000 puntos de ventas en todo el país brindando diferentes servicios a través de su plataforma.
La empresa cuenta con certificación “B”: integra el segmento de compañías que buscan utilizar las fuerzas del mercado para dar respuesta a problemas sociales y/o ambientales de las comunidades que están insertas. También se diferencia por perseguir la doble misión de generar utilidades razonables para sus inversionistas y generar, mediante su actividad principal, beneficios sociales.
TRASA tiene como propósito transformar locales, kioscos y comercios en centros de servicios. Más allá de lo que implica hacer una recarga de SUBE también ofrece el cobro de unas 6.000 facturas en todo el país a través de su centro de servicios.
Además, posee 70 cajeros Pago24 en todo el país. La mayoría están instalados en sus centros de servicios, donde las personas suelen ir a pagar sus facturas o recargar la SUBE. Están ubicados en barrios periféricos y zonas donde los cajeros bancarios no suelen llegar a la población. Estos cajeros funcionan las 24 horas y se puede operar a través de la red Link o Banelco.
“Nuestro propósito es llevar inclusión financiera a todas las personas y buscar con todos los negocios tener una política de triple impacto”, remarcó Hernán Herlein, responsable de marketing de Pago24.
Por lo general, las terminales de Pago24 se encuentran en la zona Sur del de la Ciudad y del Gran Buenos Aires. También hay cajeros operativos en el norte del país: Salta, Jujuy, Chaco, San Juan, Córdoba, Mendoza, lugares con muchísima población. Desde su sitio web, la empresa provee de un mapa con los cajeros Pago24 geolocalizados en todo el país
Parte de su estrategia de inclusión financiera consiste en llegar a barrios populares donde no hay cajeros automáticos convencionales. Por eso, instaló cajeros en lugares estratégicos como el barrio 31, en la zona de Retiro, en la 1-11-14 (Bajo Flores) y en la villa 21 24, entre Barracas y Nueva Pompeya.
Pago 24 posee Unidades Modulares de Inclusión Financiera, más conocidas como UMIF. Son como contenedores que se compran y se ambientan y además vienen equipadas un cajero y cuentan con una ventanilla para la atención al cliente. Estas unidades son las que más operaciones realizan debido al intenso movimiento de gente por la zona.
“Estos contenedores, en convenio con municipios o con el Gobierno Nacional, viendo en qué puntos estratégicos podemos acercar nuestro servicio, nos brindan soluciones para poder ingresar a esas zonas, para poder contar con energía eléctrica, tener el cajero en funcionamiento, para recargar la SUBE o cobrar servicios”, cuenta Herlein.
Durante la pandemia, las UMIF conectaron a los usuarios que viven en el barrio con los cajeros. Están instalados en plazas o en la calle de modo tal que ya no hace falta tener que viajar en colectivo o caminar a otro barrio para pagar servicios o extraer dinero, como así tampoco transportar billetes entre una zona y otra.
“En la 21 24, en la Perito Moreno, de un lado tenés el barrio y del otro lado tenés gran parte del predio, la cancha de San Lorenzo. También tenés diferentes unidades modulares que son de la Policía o de los bomberos o de diferentes comercios. Ahí hay una que es nuestra donde tenemos un cajero automático: básicamente ayuda a todos los vecinos porque no hay un cajero de un banco cerca de estos lugares donde nosotros estamos llegando”, señala Herlein.
Además de los cajeros no bancarios y de los centros de servicio, TRASA cuenta con terminales de autoservicios con más de 500 unidades instaladas. Son las famosas “maquinitas” autoservicio de Pago24 para recargar la SUBE, recargar el celular, consultar saldos y comprar pines prepagos para diferentes productos. Son negocios B2B.
Son cajeros tradicionales, que trabajan exclusivamente con la modalidad de “cash out”, es decir extracción del efectivo. Se puede operar con cualquier tarjeta de la red Link o Banelco, VISA, Mastercard, American Express, Cirrus y CABAL.
“También tenemos nuestras tarjetas Pago24, de Mastercard. Son tarjetas prepagas, no son de crédito ni de débito. Podés utilizarlas para comprar o para ir a un cajero y sacar dinero. Es otra unidad de negocios”, explica Herlein.
Las tarjetas Mastercard prepagas no son bancarias y forma parte de la estrategia de inclusión social que propone la empresa. “Hay mucha gente que no está bancarizada y no puede acceder a un débito automático como Netflix. Esa es una de las soluciones”, afirman en TRASA.
Las funcionalidades que ofrecen los cajeros de Pago24 son las mismas que las terminales mencionadas por los competidores: extracción de dinero y consulta de saldos. Tampoco cobra comisiones a los usuarios, sino que lo hace el banco o tarjeta emisora al momento de hacer la operación.
“No cobramos comisión. Tenemos todo blanqueado. Esto no quiere decir que retires algo y después te aparezca como costo bancario algún débito. Esto no lo cobra Pago24 sino que el banco emisor de tu tarjeta tiene una política en la cual retirás en un cajero que no sea de ellos y te cobran. Todo lo que sea con Pago24 está bonificado”, subraya el responsable de Marketing de TRASA.
Los usuarios podrán retirar un total de 40 billetes por extracción, aunque desde la empresa aclararan que el tope de extracción es de 15.000 pesos por día, según lo dispuesto por el BCRA para cualquier cajero bancario.
Según datos que maneja la compañía, en enero de este año se realizaron más de 150.000 extracciones de dinero en los 72 cajeros Pago24 en todo el territorio argentino. El promedio es de 2.500-3.000 transacciones por cajero por mes.
“Los cajeros que están funcionando muy bien son los que están en las UMIF en Spegazzini, en Hudson, en la 1-11-14 y también en San Francisco Solano. En Florencio Varela tenemos tres cajeros que presentan mucha actividad, tiene muchas extracciones”, comenta Herlein.
El cajero de la villa 21-24 (en Barracas) realiza el doble de transacciones por mes, de acuerdo a las estadísticas de TRASA. Hay más cajeros Pago24 en Quilmes, San Francisco Solano, y en Monte grande y más unidades en las provincias de San Juan y en Jujuy.
El sistema de recarga de efectivo es sencillo. “En nuestros centros de servicios donde la gente va a pagar facturas, a cargar su celular, a recargar la SUBE o hacer una remesa a otra provincia o al exterior, son servicios donde ingresa dinero. Ese mismo dinero que ingresa al local se pone al cajero”, cuenta Herlein.
Ante la falta de stock, la empresa envía un camión de caudales. “Se ve cómo hace la logística para cargarlo y tenerlos operativos las 24 horas”.
También hay cajeros que se entregan en comodato y el propio comercio deberá administrarlos para proveer de dinero en efectivo a los usuarios. “Hay una estación de servicio en Uspallata que entra efectivo todo el tiempo. Ellos mismos alimentan el cajero con las ventas diarias”, revela el responsable de márquetin de TRASA.
Desde TRASA afirman que, afortunadamente, sus cajeros Pago24 no han padecido ese tipo de episodios.
“Al principio teníamos un poco de miedo al instalar cajeros en los barrios populares, que los iban a robar o a romper pero la verdad es una solución que le estás dando a los vecinos. Ellos mismos lo cuidan: no tenemos ningún problema. Lo sienten como si fuera parte del barrio y es algo que ellos necesitan tener. Sino, para sacar plata necesitan tomarse un colectivo o viajar unas 40-50 cuadras, irse a otro barrio, sacar plata y volver. En cambio, teniéndolo ahí dentro del barrio es algo que les pertenece. Por eso lo cuidan”, explica Herlein.
“Al ser una empresa B de triple impacto, los cajeros tratamos de instalarlos en barrios populares o lo más cercanos posibles para poder llevar nuestro objetivo: el de la inclusión financiera”, explica Herlein.
Otra de las ventajas es que tiene las comisiones bonificadas, bien distintas a los cargos que hay que pagar por retiro de dinero en distintas redes (Link o Banelco) en los cajeros automáticos de las entidades bancarias. Desde la compañía afirman que le brindan un beneficio a los clientes.
Que los cajeros estén funcionando las 24 horas es otra de las principales ventajas, un horario que por lo general suelen emplear los bancos pero hay cajeros que dejan de operar tras el cierre de los comercios adheridos, que cumplen un horario más restringido. Sin embargo, desde Pago24 remarcan dos grandes beneficios:
“También podés operar con cualquier tarjeta, sea o no bancaria. Si tenés una prepaga de una billetera virtual o de débito de un banco es lo mismo, podés utilizarlo igual”, destaca Herlein.
“No hace falta estar bancarizado. El objetivo de la empresa es buscar la inclusión financiera para todos, no solo para los bancarizados, sino que todos estén con los mismos beneficios y puedan acceder a compras online, a pagos, a sacar plata, a manejarse dentro de este mercado”, completa el responsable de Marketing de TRASA.
“Tenemos una billetera virtual llamada billetera Pago 24, nuestra tarjeta prepaga”, señala Herlein, y agrega: “en los comercios tradicionales te cobran en efectivo pero hace tiempo veníamos cobrando con débito. Aceptar otro tipo de pagos explotó con la pandemia: aceptamos débito, crédito, todo lo que es la adquirencia también lo tenemos en nuestros centros de servicios. Estamos conviviendo con todo este mundo”.