El indicador que mide el JP Morgan perforaba los 2.000 puntos. El clima de optimismo surgió luego del visto bueno del comité de acreedores a la nueva propuesta
La reacción de los mercados con el avance de las negociaciones entre la Provincia de Buenos Aires (PBA) y los acreedores se hace sentir. El riesgo país, el indicador que mide la sobretasa que pagan los bonos, descendía este lunes 4,5% y perforaba los 2.000 puntos (cotiza en torno a los 1.996 unidades).
Los inversores tomaron como algo positivo el hecho de que el mayor Comité de Acreedores se manifestara a favor de aceptar la propuesta de Axel Kicillof. Claro que la PBA lanzó esta mañana una nueva “zanahoria” para los bonistas. Pagará el 30% del capital adeudado además de los intereses por adelantado en su intento por mostrar “buena fe”.
De esta manera, detalla la provincia, si el 75% del capital en circulación de dichos bonos otorga su consentimiento, se pagará dentro del período de gracia que estipula la documentación de los bonos, el 30% del capital que vencía el 26 de enero – aproximadamente U$S 75 millones- y dentro de los 5 días hábiles de efectivizada la enmienda, los intereses que devengue el capital postergado al 1 de mayo –aproximadamente U$S 5 millones-, postergando hasta el 1 de mayo de 2020 el pago del restante 70% de capital originalmente con vencimiento el 26 de enero de 2020.
El ministro de Hacienda y Finanzas de la Provincia, Pablo López, señaló que: “Este esfuerzo se hará con recursos provinciales, que son escasos. Por eso, la Provincia reafirma el compromiso de abordar el problema de deuda, en pos de recuperar la sostenibilidad, de forma rápida y ordenada,”, para luego agregar: “Debemos avanzar en solucionar las cuestiones más urgentes y volcar todo nuestro esfuerzo en reactivar la economía provincial”.
Más tarde, el gobernador Kicillof admitió que con el visto bueno del comité de acreedores aún no le alcanza para obtener el 75% y esquivar el default de la deuda. En declaraciones a radio El Destape, el mandatario expresó que “las aceptaciones siempre ocurren en las últimas horas y hoy se consiguió el apoyo del grupo más grande de bonistas organizados”, aunque aclaró que “todavía quedan algunos fondos que tienen posiciones complicadas”.
Kicillof agregó que “la propiedad de estos bonos está muy atomizada” y que unos 200 fondos aceptaron la propuesta, por lo que “ahora se concentra buena parte relevante en tenedores institucionales que tienen volúmenes mayores”.
Sin especificar de cuál se trata, admitió que existe un fondo “que tiene una cantidad muy significativa de bonos y que no está de momento mostrando el mismo grado de adhesión o ayuda en el diálogo constructivo y de buena fe” que se lleva adelante con los acreedores. Se trataría de Fidelity, que en el mercado se cree que tiene 16% de la tenencia.
