Bajó las calificaciones de emisor en moneda local de Camuzzi Gas Pampeana S.A., Distribuidora de Gas Cuyana S.A., MetroGAS S.A. y Naturgy BAN S.A., y asigna perspectiva negativa.
Las calificaciones de acciones de tres de las cuatro entidades se afirman en 2.ar. Asimismo, Moody’s Local Argentina, confirma la calificación de emisor en moneda extranjera de Metrogas S.A., y le asigna una perspectiva negativa en línea con la perspectiva de la calificación de emisor en moneda local.
Las bajas de calificación indicadas más arriba reflejan que las tarifas de las compañías distribuidoras de gas se encuentran congeladas desde abril de 2019 y, si bien esperamos que exista un aumento tarifario en los próximos meses, actualmente es altamente incierto el porcentaje de aumento que se aplicará sobre el margen de distribución de gas y cómo evolucionará el régimen de tarifas en adelante.
Moody’s Local Argentina espera que la consistencia y sostenibilidad de la recuperación de costos para los servicios públicos regulados en adelante sea mayormente incierto, dado el actual marco regulatorio del país.
La confirmación de las calificaciones en moneda extranjera de MetroGAS S.A., refleja nuestra consideración de que, a pesar de las limitaciones de acceso al Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) impuestas por el Banco Central de la República Argentina (BCRA), el desempeño de las reestructuraciones corporativas en el marco de dichas limitaciones no se ha visto perjudicado en forma significativa.
La perspectiva negativa de las calificaciones refleja que, para Moody’s Local Argentina, la falta de políticas claras para el sector en el corto y mediano plazo y un aumento transitorio de tarifas que resulte insuficiente para permitir una recuperación de costos adecuada, tendrá un impacto negativo en el perfil crediticio de las compañías y las enfrentará, asimismo, a mayores dificultades para cubrir sus necesidades de financiamiento.
El aumento de los costos de operación e inversión que han enfrentado las compañías distribuidoras ante tasas de inflación persistentemente altas, sumado al congelamiento tarifario desde inicios de 2019, han deteriorado sus márgenes de rentabilidad, su capacidad de generación interna de fondos y su liquidez.
Adicionalmente, dado el contexto de emergencia pública en materia sanitaria en el que se encuentra el país, la mayoría de las compañías han sufrido un deterioro en la facturación y cobro de los servicios brindados, generando un aumento en los índices de mora e incobrabilidad, que ha aumentado la presión negativa en su capacidad de generación de fondos operativos.
Destacamos, asimismo, que, si bien las compañías mantienen un bajo o moderado nivel de apalancamiento financiero, han utilizado su capital de trabajo, principalmente el pago a proveedores de gas, como mecanismo de financiamiento para subsanar el deterioro en términos reales de sus ingresos, principalmente debido al congelamiento tarifario ya mencionado, y el deterioro de la recaudación, que se ha visto afectada por el incremento en las tasas de morosidad e incobrabilidad del sector en general.