Con lo peor de la crisis cambiaria que parece haber quedado atrás, la administradora de fondos analizó las oportunidades que hay en el mercado. Los papeles con potencial.
Lo peor de la corrida contra el peso parece haber quedado atrás y ahora toca ver cómo la turbulencia financiera le pega a la economía real. Sin embargo, en el nuevo panorama macro hay sectores que pueden descollar y una buena forma de asociarse a ellos es invertir en sus acciones. Exportadores, energéticas, bancos y empresas de telecomunicaciones tienen las mejores perspectivas, identificó un informe de Mills Capital Group.
“Lo que vimos en el segundo trimestre del año, la turbulencia que golpeó al peso argentino, cambió el signo de la marcha de la economía de una leve expansión a una esperablemente corta recesión. Es así que, como ahorristas, conviene revisar cómo quedamos parados y quién gana con esta reconfiguración de las variables macro”, intrdujo.
Con dólar más alto, el primero que aparece como ganador es el sector exportador, no sólo el agro, los bancos siguen muy bien parados y generando buenos balances y, por último, las empresas de servicios públicos pueden estarse tranquilas respecto a la marcha del aumento de tarifas.
El principal cambio que supone pasar de un dólar a $ 18, como estaba en diciembre pasado, a un dólar a $ 28 son condiciones mucho más favorables para las empresas que trabajan con el mercado externo o bien compiten por el mercado interno con empresas del exterior. En la bolsa porteña este sector, el que produce bienes transables, está muy bien representado. Y no sólo por el agro.
Cresud, inversiones del agro, Agrometal (maquinaria agrícola), la tucumana San Miguel (dedicada a la exportación de limones), Siderar (metalmecánic a asociada al mercado brasileño) y Aluar (productora de aluminio principalmente para exportación) son las que se destacan en este rubro. El club de las ganadoras al que los ahorristas pueden asociarse comprando acciones con vistas al mediano o largo plazos.
En segundo lugar, las acciones de bancos y empresas financieras parecen mantenerse al margen de la caída de la actividad. Es que la desaparición de trabas al sector luego del cambio de Gobierno en 2015 inició un proceso de expansión importante para un país con niveles de bancarización muy bajos en la comparación internacional. Así, la inercia del crecimiento por sí sola parece ser garantía de balances muy redituables y sanos para el sector.
En este rubro, algunos de los representantes más prometedores son Banco Supervielle, Banco Macro, Banco Francés, Banco Hipotecario y Grupo Financiero Galicia, todas empresas con acciones en el mercado local.
En tercer lugar, luego de duros castigos por los rumores de nuevos techos a las tarifas que nunca se concretaron, aparecen en recuperación las cenicientas de este período presidencial. Luego de sufrir en las cotizaciones de sus acciones por más de una década en la que las tarifas que percibían se atrasaban a pasos agigantados respecto de la inflación, el camino futuro de aumentos de tarifas y reducción de subsidios parece garantizado.
Para asociarse al futuro promisorio de este sector también sobran las opciones.
Pampa Energía, Central Puerto, Transener, Transportadora de Gas del Sur y Transportadora de Gas del Norte, entre otras, son algunas de las acciones que prometen estar entre las ganadoras del corto y mediano plazos que conviene tener en cartera.
