La compañía que preside Marcelo Mindlin aprovechó la baja de riesgo país y siguió los pasos de YPF, con una colocación a diez años. Sin embargo, el rendimiento que tuvo que pagar estuvo levemente por encima del de la petrolera.
Con el riesgo país orillando los 800 puntos básicos (tras haber superado los 1.000 puntos hace poco más de un mes), más empresas se animan a salir a buscar financiamiento en el mercado de capitales. La semana fue YPF, con un bono de u$s 500 millones y ahora le tocó a Pampa Energía.
La principal compañía de energía eléctrica de la Argentina terminó colocando los u$s 300 millones inicialmente previstos a diez años de plazo y decidió no ampliar la emisión. El rendimiento de la ON para la empresa quedó en 9,37% anual, es decir abajo de un dos dígitos pero levemente por encima de lo que había conseguido la petrolera de mayoría estatal hace apenas una semana.
Éstas fueron las primeras dos colocaciones de deuda corporativa de largo plazo en lo que va de 2019, dado que el mercado se mantenía cerrado para la Argentina ante la suba del riesgo país.
Pero cuando pocos lo esperaban, los bonos comenzaron una recuperación gradual, lo que permitió que algunas empresas aprovechen para salir a emitir de deuda y armarse de un “colchón” en dólares.
De paso, estas compañías con más trayectoria en los mercados bursátiles y financieros, aprovecharon esta “ventaja” que se abrió para asegurarse divisas y no depender tanto de las turbulencias propias que se esperan posteriormente a las PASO.