La falta de una moneda sólida, las reformas pendientes y los límites del “Plan Picapiedras” fueron analizados por el economista que pronosticó inflación en baja y calma cambiaria hasta las PASO.
El economista Carlos Melconián sorprendió al auditorio del 7° Latam Economic Forum con una pregunta incómoda. Al referirse al “problema estructural” de moneda que padece la Argentina, interrogó: “¿Quién ahorra en pesos acá?”. La única respuesta que se oyó en el Hotel Alvear fue el silencio.
Tal como suele hacer en sus presentaciones públicas, Melconián se refirió al esquema económico actual como “Plan Picapiedras”, en alusión a que considera rústicos sus fundamentos: “Funcionó bien para frenar el riesgo de default y dar estabilización financiera. Este es un programa para llegar a las elecciones, no le pidan flores en el jardín. Sin este programa, no se gana; con él, se puede ganar.”
“Salvo un resultado espantoso en las PASO, la pulseada del dólar es ganable. La banda cambiaria todavía no fue testeada, pero hay fundamentos para que esa pulseada en el mercado cambiario se gane. Y esperemos que el tipo de cambio acompañe a la inflación”, señaló.
Pronosticó un índice de inflación a la baja para los próximos meses, inferior al 2,5% en julio. Sobre ese punto, aseguró que al analizar los 4 años de Mauricio Macri es natural tener una visión similar en materia de inflación a la de los últimos 4 años del kirchnerismo. A la vez, reconoció que el actual gobierno “tuvo que desarmar el espanto, medidas como el cepo y los holdouts. Y eso es muy difícil de explicar en el conurbano, porque a diferencia del 2001, en diciembre de 2015 no explotó nada de ese espanto. Y el primer error de este gobierno fue no salir a explicarlo.
En su presentación, advirtió que la Argentina “ya estaba en zona de no colocación de deuda” antes de que se afianzaran las chances de la expresidenta de volver al poder. “No es todo riesgo Cristina”, señaló Melconián, quien puso otras alertas en relación con al endeudamiento. “No me gusta que se tome tanta deuda de corto plazo en el mercado de capitales para financiar gasto corriente”, dijo.
En cuanto a las reformas que deberá encarar el próximo gobierno, mencionó la de la legislación laboral, cuyo nivel de litigiosidad “preocupa tanto a Techint y a Arcor como a un pyme del conurbano”, pero destacó especialmente los cambios en el sistema jubilatorio, destacando además que durante este gobierno el país “está peor” en materia de gasto previsional.
“Hay que hacer una reforma previsional sin emocionalidad. El sistema actual es infinanciable. Incorporamos 4 millones de personas sin aportes ni explicaciones sobre cómo se va a financiar, encima en un país donde los aportes laborales son altos. La sociedad argentina le debe preguntar a los responsables de estas decisiones. Y la política se tiene que hacer cargo”, señaló.
Tras calificar como “intolerable” el nivel de presión tributaria y de gasto público, Melconian planteó que el próximo gobierno no solo deberá tener un buen programa económico, sino que además deberá construir un “paraguas político” para llevarlo adelante: “Aprendí que manda la política. Pero la política también tiene que aprender que uno más uno es dos. Hasta Fidel lo sabía. Pero la política es clave. Y no soy de los que creen en las mayorías sino en los consensos”.
