Argentina debe generar mayor ingreso de divisas, acumular reservas, ampliar los créditos para el desarrollo y sellar un nuevo programa con el FMI para generar fondos frescos, aseguró el expresidente del Banco Central Martín Redrado.
El economista habló en el Congreso Nacional Pyme y dijo que el país arrancó una “nueva etapa”.
El economista sostuvo que “si hacemos las cosas bien, la Argentina puede crecer 10 años seguidos, saliendo del sube y baja económico de las últimas décadas”.
“Es necesario tener una serie de leyes con capacidad real de implementación, creo que es fundamental una Ley de Déficit cero para los próximos 10 años, en donde también se establezca que el gasto no pueda crecer más allá de la inflación”, señaló.
El economista sostuvo que se necesita “fomentar la innovación productiva, hacer una revolución impositiva y apuntar a otra revolución, la exportadora, con apertura a nuevos mercados”.
“Hoy el mundo es la India. También están Vietnam, Corea y Malasia. Esos son los países en los que tenemos que profundizar acuerdos”, proyectó, sin descartar las alianzas con Brasil y Bolivia.
En la misma línea, se manifestó a favor de establecer vínculos con organismos crediticios.
“Argentina empezó una nueva etapa en donde las PyMes son muy importantes. Es fundamental sacarles el peso en materia impositiva. Nos tienen que dar previsibilidad en el sector privado”, dijo.
“Estamos abrumados por problemas, pero prefiero discutir soluciones para las pymes en particular y la economía en general. Tenemos que salir del enfoque de ´coyunturalitis´ (Banco Central, dólar, precios) para tener una mirada estratégica para salir del escenario de electrocardiograma argentino en el que subimos y bajamos”, señaló.
Redrado coincidió en que “la herencia recibida el 10 de diciembre fue muy pesada. No se puede pagar más de lo que ingresa. Se llevaron puesto el Banco central y los ahorros de los argentinos”.
“Estamos frente a un cambio sustantivo. El presidente tiene un compromiso con el equilibrio presupuestario. Este concepto central que llegó para quedarse. Ya no hay marcha atrás. No hubo otro presidente con el mismo compromiso con el equilibrio presupuestario. Este es un pilar fundamental. Pensando hacia adelante, los cambios no dependen de una sola persona. Hay que darle al gobierno las herramientas que necesitan”, señaló.