Es uno de los cambios claves para el funcionamiento del mercado cambiario que divulgó hoy el staff del organismo. Buscan fortalecer reservas y preparar el terreno para la unificación cambiaria
El dólar “blend” para exportadores se termina a fin de mes. Así lo resolvió el Gobierno junto al FMI, según consta en el “staff report” que el organismo divulgó hoy. Se trata de la medida más fuerte e inmediata que se dio a conocer en el largo informe, que además establece una cantidad de parámetros para llegar a la competencia de monedas y el regreso a los mercados internacionales.
“Las autoridades se comprometen a avanzar en un esquema de normalización cambiaria. Esto incluye el final de dólar blend para fin de junio y la eliminación del impuesto PAIS a fin de año”.
El dólar “blend” implica que un 20% del total de las exportaciones se puede liquidar a través del “contado con liquidación”, lo que representa una importante oferta de divisas. Esto a su vez le pone un techo al aumento de los dólares financieros.
El problema con esta operatoria es que al mismo tiempo le quita una importante fuente de acumulación de reservas al Central, que es justamente uno de los objetivos prioritarios para este año.
Al mismo tiempo, se menciona la necesidad de “flexibilizar” el funcionamiento de la política cambiaria. Aunque no se dan mayores especificaciones, es probable que esto también incluya un cambio en la política de ajuste gradual para el dólar, que se mantiene en el 2% mensual desde principios de año.
El FMI insiste en que el tipo de cambio debe “reflejar los fundamentals de la economía argentina y al mismo tiempo asegurar la política de acumulación de reservas”.
El fin del dólar “blend”, que viene funcionando sin modificaciones desde la última parte del Gobierno anterior, es un paso clave hacia la normalización del mercado cambiario.
Por un lado, permitirá que el Central compre más dólares y esté mejor preparado en los próximos meses, cuando estacionalmente hay menos ingreso de divisas del sector exportador.
Por otra parte, al reducirse la oferta de dólares en el mercado bursátil podria haber una mayor presión sobre los distintos tipos de cambio. Es razonable esperar que los dólares financieros peguen un mayor salto a partir de estas medidas.
Pero al mismo tiempo también el Central se vería obligado a acelerar el ritmo de aumento del dólar oficial, con el objetivo de evitar que aumente demasiado la brecha cambiaria.