La operación se habría cerrado por USD 3.200 millones y marca una fusión histórica entre dos entidades emblemáticas.
Un matrimonio nacido del dolor, más que del amor, según describieron medios internacionales como Reuters. Después de mucha especulación y con los mercados en pánico, UBS consolidó su adquisición repentina de Credit Suisse el domingo por la tarde.
El precio de la adquisición fue cercano a los USD 3.000 millones. El presidente de UBS, Colm Kelleher, y el director ejecutivo de UBS, Ralph Hamers, estarán a cargo d ela transacción.
Como consecuencia de la operación, Credit Suisse será liquidado. Y la transacción implica un ahorro en costos de U$S 8.000 para 2027. La integración llevará de 3 a 4 años.
“Esta adquisición es atractiva para los accionistas de UBS pero, seamos claros, en lo que respecta a Credit Suisse, se trata de un rescate de emergencia”, dijo el presidente de UBS, Colm Kelleher, en un comunicado, en un intento no muy disimulado del directorio y el equipo ejecutivo de la entidad.
“Es un día histórico y un día que esperábamos que no llegara”, agregó Kelleher en una llamada de analistas que incluía al director ejecutivo de UBS, Hamers. Los ejecutivos o miembros de la junta de Credit Suisse no estaban en la llamada.
Los ejecutivos de UBS agregaron en la llamada que se moverían “rápidamente” para liquidar el banco de inversión de Credit Suisse. La compañía dijo que había tomado reservas contra los litigios de alto perfil.
