Se descuenta luego de este dato que la Reserva Federal volverá a subir las tasas de interés por lo menos dos veces más. Las pérdidas en los mercados fueron moderadas a pesar de estos temores
La inflación de enero subió 0,5% en Estados Unidos, en lo que representó una aceleración respecto a lo sucedido en meses previos. En términos anuales, el incremento es de 6,4%, todavía alto aunque ya lejos del pico de 9,1% registrado en junio pasado.
El IPC subyacente, que elimina los componentes volátiles de alimentos y energía del informe, subió un 5,6 % interanual, más de lo esperado, y un 0,4 % con respecto al mes anterior. Las estimaciones previas calculaban un aumento de 5,5% y un aumento mensual del 0,4% en la lectura del IPC subyacente.
Wall Street arrancó la jornada volátil tras conocerse estos datos, pero rápidamente las acciones se pusieron negativas. Los inversores ahora empiezan a descontar que la Reserva Federal seguirá aumentando las tasas de interés para dominar la inflación, aunque las próximas subas (por ejemplo en marzo) serían de solo 0,25% (ó 25 puntos básicos).
A media jornada, el Dow Jones caída 0,7%, mientras que el Nasdaq perdia bastante menos, apenas 0,26%.
Si bien el panorama de la inflación ha mejorado desde el pico del ciclo actual el año pasado, el aumento de los costos artículos esenciales siguen siendo una carga para los consumidores estadounidenses.
Los formuladores de políticas monitorean la inflación “básica” más de cerca debido a su mirada matizada en insumos clave como la vivienda, mientras que la cifra general del IPC se ha movido en gran medida junto con los precios volátiles de la energía el año pasado.
Los precios de la vivienda continuaron siendo el factor dominante en el informe del IPC, representando casi la mitad del aumento mensual de la inflación, dijo la Oficina de Estadísticas Laborales. La categoría de alojamiento del IPC, que representa el 30 % del IPC general y el 40 % de la lectura central, aumentó un 0,7 % durante el mes y un 7,9 % durante el último año.