De acuerdo con un informe de la consultora Equilibra, hay tres factures que explican el ritmo de depreciación del tipo de cambio.
El Banco Central desaceleró el ritmo de devaluación desde 7% a principios de diciembre hasta 5,5% en las últimas ruedas, mientras que las cotizaciones alternativas pegaron un salto de entre 2,5% y 7,5% esta semana y la brecha rozó 100%, destacó un informe de la consultora Equilibra.
Equilibra explicó que el menor ritmo de depreciación del tipo de cambio responde a 3 factores:
- La desaceleración de la inflación;
- Tasas de interés reales positivas (la Leliq paga una tasa mensual de 6,3%);
- El fuerte ingreso de divisas producto de la segunda ronda del “Dólar Soja” (se liquidaron US$ 3.035 millones y el BCRA pudo comprar US$ 2.188 millones).
Y completó que a pesar de que en diciembre la suba del dólar oficial se ubicaría por encima de la inflación por segundo mes al hilo, no es una tendencia que se mantendría: según el promedio de los últimos 20 años, el tipo de cambio real multilateral suele apreciarse un 3,7% en años electorales y 6,1% en años de elecciones presidenciales.
Equilibra analisó que la incertidumbre electoral y el anticipo de un verano “caliente” en el mercado financiero/cambiario por la escasez de divisas estuvieron detrás del salto en las cotizaciones alternativas.
“El anuncio de que el fenómeno ‘la Niña’ finalizaría a fines de enero y la muy buena licitación de Finanzas de diciembre (obtuvo financiamiento neto por más de $230.000 millones) trajeron alivio a los mercados financieros”, agregó.
Equilibra finalizó indicand que el desafío fiscal/monetario del primer bimestre de 2023 es significativo: el Tesoro afronta vencimientos de títulos en moneda extranjera por USD 1.115 millones y en pesos por $2,5 billones, mientras que la reversión de la estacionalidad de la demanda de dinero hará que el BCRA tenga que esterilizar más de $1 billón para que el excedente de pesos no presione a los mercados financieros.