La tasa a diez años de los bonos del Tesoro norteamericanos roza ya otra vez el 4%. Se esperan nuevos y agresivos incrementos por parte de la FED, lo que golpea al mercado de acciones
Wall Street sufre una dura caída en el último día de la semana, que borra buena parte de las ganancias acumuladas en los primeros días de octubre. Datos de empleo mejores a los esperados por los inversores alertaron sobre la necesidad de agresivas subas de tasas adicionales por parte de la FED, lo que generó masivas ventas.
La economía estadounidense agregó 263.000 puestos de trabajo en septiembre, mientras que la tasa de desempleo cayó al 3,5 %. Los economistas esperaban un aumento de la nómina de 255.000 y que el desempleo se mantuviera en el 3,7%.
El S&P 500 pierde 2,65%, el Dow Jones cae 2% y la peor parte se la llevan las acciones tecnológicas, ya que el Nasdaq se derrumba 3,6%.
En el mercado de bonos, los rendimientos del Tesoro se dispararon, con la nota de referencia a 10 años superando el 3,87% anual y el rendimiento a 2 años se fue a casi 4,3% anual.
“La reacción negativa del mercado es una señal de que los inversores están procesando la probabilidad de que no haya cambios en el agresivo libro de jugadas de la Fed en el corto plazo”, dijo Mike Loewenart, jefe de construcción de carteras modelo en la Oficina de Inversiones Globales de Morgan Stanley, en un comunicado. Nota. “Tenga en cuenta que la próxima decisión de la Fed no es hasta principios de noviembre, por lo que será necesario digerir muchos más datos, entre ellos el indicador de inflación de la próxima semana”.
En notas de investigación recientes, los analistas de JPMorgan dijeron que los alcistas de la renta variable necesitarían un aumento del empleo de solo 100.000 por mes para que el mercado altere sus expectativas de la Fed, mientras que los analistas de Bank of America dijeron que no se producirá un giro “hasta que las nóminas caigan sustancialmente”.
“El trabajo de la Fed aún está lejos de terminar: espere que continúen los aumentos hasta que las nóminas negativas estén casi disponibles”, señaló un equipo de BofA dirigido por la estratega de investigación de tasas Meghan Swiber.
Además, los propios funcionarios de la Reserva Federal enviaron mensajes claros en las últimas semanas de que hasta ahora no hay planes para retirarse de la intervención política agresiva.
“Tenemos más camino por recorrer”, dijo el jueves el presidente del Banco de la Reserva Federal de Chicago, Charles Evans, indicando que la tasa de referencia probablemente estará entre 4,5% y 4,75% para la primavera de 2023. “La inflación es alta en este momento y necesitamos una política más restrictiva”.