De acuerdo con un informe privado, los precios minoristas consolidaron su piso con el dato de marzo. La depreciación del tipo de cambio rondó el 58% en las últimas cinco ruedas y presionan aún más.
La inflación de marzo de 6,7% puso un nuevo piso para los precios en los próximos meses y la más acelerada depreciación del dólar se convirtió en un factor de presión extra, de acuerdo con un informe de Delphos Investment.
“En el corto plazo cobran todavía más importancia las expectativas inflacionarias reflejadas en acuerdos paritarios, la variación del tipo de cambio oficial y los futuros ajustes en las tarifas de servicios públicos y combustibles que las perspectivas de mayor ordenamiento macroeconómico a mediano y largo plazo que propone el acuerdo con el FMI“, mencionó Delphos.
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Precisamente, la depreciación del tipo de cambio oficial, que se aceleró sin prisa pero sin pausa hasta llegar al 58% anual en las últimas 5 ruedas es un factor inflacionario en sí mismo.
“Sin embargo, esta aceleración no se está reflejando en mayores compras del BCRA que ayuden a fortalecer las reservas”, destacó el informe y putualizó que en lo que va de abril la entidad que dirige Miguel Ángel Pesce no logra ponerse en positivo en lo que se refiere al balance mensual de compra neta de dólares.
Bajo este panorama, Delphos elevó nuevamente las expectativas de inflación entre 65% y 66% anual, considerando un piso para abril de 5,2/5,3% y un incremento de tarifas de gas y electricidad hacia junio o julio.
“Sin embargo, mantenemos nuestras estimaciones de crecimiento entre 3% y 3,5% para este año, considerando que la mayor inflación no frenará el crecimiento abruptamente durante 2022”, completó.
