Es la estimación del banco de inversión brasileño BTG Pactual. La entidad consideró que el acuerdo impactará de forma negativa en la imagen del presidente Mauricio Macri.
La banca de inversión brasileña BTG Pactual estimó que la Argentina obtendrá del Fondo Monetario Internacional (FMI) una línea de crédito precautoria por unos 11.000 millones de dólares, de acuerdo con un informe que envió hoy a sus clientes.
“Nuestra opinión es que, en general, el anuncio es negativo tanto para el ARS, el crédito y las acciones principalmente, a través del aumento del riesgo político, con el escenario más probable de una caída en la imagen del Gobierno que podría ser capitalizada por Cristina Kirchner, hasta ahora con casi nulas posibilidades de regresar”, introdujo el documento.
Consideró que los programas de préstamos del FMI tienen una imagen muy negativa de la sociedad, ya que traen recuerdos de los años 90 antes de la dura crisis económica de 2001. “El rechazo a los programas del FMI fue un pilar de la propaganda política de los Kirchner durante sus administraciones, y fue muy popular, y también fue utilizado como una amenaza en 2015 contra Macri, cuando Macri ganó por un margen estrecho”, agregó.
En cuanto a la línea a observar, BTG Pactual consideró que aún debe ser aprobada por el Directorio Ejecutivo del FMI. El tipo de línea, plazo y condiciones aún no han sido delineados, aunque es más probable que sea un PLL, una Línea de Liquidez Precautoria, que según el FMI es elegible para los países que enfrentan “vulnerabilidades moderadas”.
“Este tipo de préstamo se otorga contra la imposición de condiciones cuantitativas, destinadas a abordar las vulnerabilidades económicas identificadas por el FMI. Una FCL (Línea de Crédito Flexible) sería la mejor alternativa, ya que no implica condiciones impuestas, y el desembolso es directo, aunque se otorga a países con fundamentos muy sólidos”, agregó.
Y consideró que el SBA (acuerdo Stand-By) sería más negativo, ya que se otorga a los países que requieren ajustes de política sustanciales que muestran signos de alto riesgo de insolvencia e implica condiciones más exhaustivas que un PLL.
Bajo un PLL, la cantidad de condiciones debería ser menos abrumadora que en los préstamos Stand-By del FMI, que se otorgan a países con altas vulnerabilidades de solvencia, pero aún podría implicar, en el caso de Argentina, objetivos cuantitativos sobre el saldo en cuenta corriente o saldo fiscal que podría ser vinculante, y el impacto aún depende de cuáles sean estas condiciones.
Los PLL suelen oscilar entre 6 meses y uno o dos años, por un monto que puede ir desde 5.600 milones de dólares a 11.000 millones. “Los acuerdos PLL a seis meses no se supervisan, mientras que los préstamos a 1-2 años tienen revisiones de 6 meses con objetivos cuantitativos establecidos en línea con las revisiones programadas”, mencionó.
Los préstamos a 6 meses son por un máximo del 125% de la cuota potencialmente elevada al 250% por el FMI en circunstancias extraordinarias.
Los reembolsos generalmente se pagan dentro de los 3,5-5 años del desembolso. Los acuerdos PLL de uno o dos años tienen un seguimiento semestral por parte de la Junta Ejecutiva del FMI que evalúa el grado de cumplimiento del programa, y el acceso a la línea se realiza por etapas a través de desembolsos semestrales.
Los préstamos de 6 meses podrían incluir la imposición de medidas previas si es necesario para el programa. Actualmente, solo Marruecos tiene un PLL con el FMI, aunque en el pasado también se otorgó un PLL a Macedonia. Ambas líneas fueron por 24 meses, y ambas tenían objetivos en el nivel de reservas internacionales, y en el equilibrio fiscal.
Marruecos obtuvo una línea de 24 meses en 2014 por un importe del 550% de la cuota y la renovó en 2016 por otros 24 meses para el 280% de la cuota. Marruecos no recurrió al arreglo y ha estado tratando la línea como precaución. A Macedonia se le concedió un PLL de 24 meses en 2011 por el 600% de la cuota, con un 286% en marzo de 2011, aunque no se renovó el PLL después de 2013.
erdos PLL a seis meses no se supervisan, mientras que los préstamos a 1-2 años tienen revisiones de 6 meses con objetivos cuantitativos establecidos en línea con el esquema