Los valores se derrumban frente a la posible adopción de nuevas restricciones, especialmente en los papeles cíclicos y de turismo; mientras que se fortalecen los activos más seguros, incluyendo los bonos del Tesoro, el yen y el oro.
Las principales bolsas internacionales registraban hoy fuertes caídas de hasta el 4%, mientras que el petróleo operaba con el barril hasta 8% a la baja, tras la detección en Sudáfrica de una nueva variante de Coronavirus potencialmente más contagiosa, que podría ser resistente a las actuales vacunas.
La variante B.1.1.529 tiene un número “extremadamente elevado” de mutaciones y un “potencial muy alto de propagación”, según indicó el virólogo Tulio de Oliveira de la Universidad de Kwazulu-Natal, y la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó ayer que la nueva variante está siendo “monitoreada”.
Los valores se derrumban frente a la posible adopción de nuevas restricciones, especialmente en los papeles cíclicos y de turismo; mientras que se fortalecen los activos más seguros, incluyendo los bonos del Tesoro, el yen y el oro.
Al mismo tiempo, los inversores se muestran preocupados de que, debido a la inflación, los bancos centrales retiren sus políticas de estimulo antes de lo planificado, en momentos donde pueden establecerse nuevas restricciones a la economía debido a los rebrotes.
“Esta vez los bancos centrales no tienen margen para actuar. Tienen que elegir entre luchar contra la inflación o impulsar el crecimiento”, indicó Ipek Ozkardeskaya, analista de Swissquote a la agencia Bloomberg.
En ese marco, países como Eslovaquia y Austria ya anunciaron confinamientos nacionales de 14 y 10 días respectivamente, mientras que la Unión Europea, Reino Unido, India y Japón ya suspendieron los vuelos a Sudáfrica y sus países vecinos.
Italia endurecerá las medidas vigentes contra los no-vacunados, en tanto que Alemania esperará al cambio de gobierno en los próximos días.
Los principales índices de la región Asia-Pacífico cerraron con valores negativos, según la agencia de noticias Bloomberg, en su mayor caída en dos meses.
Anotaron caídas el índice japonés Nikkei con una baja de 2,53%, Hong Kong (Hang Seng) 2,67%, Corea del Sur (Kospi) 1,47%, Taiwán (Taiex) 1,61% y los índices chinos de Shanghai y Shenzhen con 0,56% y 0,20% respectivamente.
Por su parte, las principales bolsas europeas operaban en rojo en su peor sesión en más de un año: retrocedían Londres (FTSE100) 3,12%, París (CAC40) 3,92%, Francfort (DAX) 3,31%, Milán (Ftsemib) 3,60% y Madrid (IBEX35) 4,24%.
Los papeles aéreos y turísticos promedian bajas del 6,9% con empresas como Easyjet, Airbus e IAG (propietaria de British Airways e Iberia) cayendo entre el 9% y el 10%.
Asimismo, también se ven afectadas los papeles de las energéticas y mineras.
Las bajas también afectaban a las bolsas de Nueva York en una jornada reducida de operaciones por ser posterior al Día de Acción de Gracias: el principal índice, el Dow Jones Industriales, caía 2,58% hasta 34.881,34 puntos; mientras que el selectivo S&P 500 y el tecnológico Nasdaq se contraían 1,90% y 1,65% respectivamente, con los descensos liderados por los papeles energéticos, turísticos, financieros e industriales.
Se destacan las caídas de American Express (-8,3%), United Airlines (-9%) y American Airlines (-7%).
Por el contrario, subían fuertemente las acciones de farmacéuticas como Moderna (+22,80%) y Pfizer (7,05%).
Del mismo modo, retroceden las criptomonedas con el bitcoin cayendo más del 7% hasta US$ 54.300, habiendo acumulado un retroceso de casi el 20% del ultimo récord registrado a principios de este mes.
En tanto, la Bolsa de San Pablo operaba con un rojo del 3,63% y se ubicaba su principal índice, el Bovespa, en 101.967,20 puntos.
De relevancia para la Argentina, los futuros de granos se negociaban en la apertura del Mercado de Chicago con valores negativos: la soja retrocedía US$ 6,15 para situarse en US$ 459,20 para los contratos con entrega en enero.
Por su parte, para las entregas en diciembre, el trigo y el maíz descendían US$ 5,14 y US$ 3,35 hasta US$ 302,30 y US$ 224,30 respectivamente.
Por otro lado, la ola de pesimismo también afectaba al petróleo que operaba en rojo, a partir de la amenaza a la recuperación económica (y, por tanto, a la demanda de combustible) que representan los rebrotes de Covid-19 en un contexto de incremento de producción de crudo, que junto con la liberación de reservas estratégicas efectuadas por países como Estados Unidos y China, podría provocar un sobrante de stock, según indican diversas proyecciones.
El crudo West Texas Intermediate (WTI), que cotiza en el mercado a futuro de Nueva York (Nymex), se contraía 8,51% y se comercializaba a US$ 71,72 el barril en los contratos con entrega en diciembre.
En tanto el Brent, que opera en el mercado electrónico de Londres (ICE), se negociaba a US$ 76,01 y se desvalorizaba 7,55% para la entrega en enero.
Por último, el bono a 30 años de EEUU mostraba un rendimiento de 1,87%, mientras el título a 10 años rendía 1,51% anual y el mismo activo a dos años contabilizaba una renta de 0,51%.