Javier Timerman, Claudio Loser, Alberto Bernal, Santiago López Alfaro y Pilar Tavella evaluaron las condiciones de un entendimiento.
Los analistas ven en el horizonte la posibilidad de que la Argentina avance en un acuerdo con el FMI, pero mantienen diferencias sobre la velocidad que podría tomar cerrarlo, y en ese marco confían en contar con más datos en las próximas semanas, una vez que el Gobierno envíe al Congreso en diciembre un proyecto de ley con los detalles de un programa económico plurianual, como anticipó anoche el presidente Alberto Fernández.
“En la primera semana de diciembre de este año, enviaremos al Congreso de la Nación un proyecto de ley que explicite el Programa económico plurianual para el desarrollo sustentable“, dijo el jefe de Estado, para luego enfatizar que el mismo “contemplará los mejores entendimientos que nuestro gobierno haya alcanzado con el staff del FMI en las negociaciones que lidera nuestro ministro de economía, Martín Guzmán, sin renunciar a los principios de crecimiento económico e inclusión social a los que me he referido previamente”.
El economista Javier Timerman, en diálogo con la agencia de noticias Télam, dijo que el discurso del Presidente le pareció “muy atinado porque fue moderado y dio tres puntos muy relevantes: uno, que va a haber un acuerdo con el FMI y que ese acuerdo ya está bastante avanzado y cuenta los apoyos de Cristina Fernández de Kirchner y de Sergio Massa.
El socio de la consultora Adcap y fundador de Banza resaltó también que en su discurso “el Presidente se encargó de enfatizar además de que va a presentar un plan de varios años, que es lo que el mercado y muchos interlocutores dentro del país estaban exigiendo: un plan que permita ver el largo plazo, y estas dos cuestiones van a acelerar la firma del acuerdo con el FMI”.
Claudio Loser, economista argentino y exdirector del Departamento Hemisferio Occidental del organismo, dijo que ve “poco realista pensar en hacer un acuerdo lo antes posible” y recalcó que, “dadas circunstancias actuales, hay que sentarse aún a negociar, según las últimas palabras de (Kristalina) Georgieva en Roma”.
“Probablemente primero negocien con el personal del Fondo, y después con la venia del FMI tener una presentación en el Congreso que lo avale”, continuó.
En lo que respecta al compromiso que la Argentina deberá cubrir en diciembre próximo, Loser opinó que “quizá puedan demorar un poco el pago o luego podrían darse ciertas cantidades para compensar el pago de diciembre, eso lo creo posible, pero es difícil pensar en un programa acordado y con desembolsos en diciembre”.
Loser sostuvo que la posibilidad de alcanzar un acuerdo tiene “una mayor probabilidad” en los próximos meses, no en el corto plazo y consideró “importante” que exista un programa apoyado por el Congreso.
“Es importante un programa apoyado por el Congreso, no solo la oposición para considerar los objetivos buscados y medidas realistas”, acotó.
Otro especialista, Santiago López Alfaro dijo que en el mercado “se está pensando” que el acuerdo podría ser posible el año que viene y puso como ejemplo de esto que “los precios no están marcando eso (en referencia a la posibilidad de alcanzar un acuerdo) de manera inmediata”.
En tanto, Alberto Bernal, de XP investment, manifestó que está “casi completamente convencido de que habrá un acuerdo” y que la pregunta clave es saber si llegará “antes del segundo trimestre de 2022, cuando vencen los pagos de la deuda, o si se alcanzará después”.
En un informe de la consultora, Bernal señaló que el FMI también quiere ser “pragmático” para llegar a un acuerdo, y advirtió que en el organismo son conscientes de que “solicitar un ajuste fiscal y monetario agresivo poco después de la pandemia podría significar un riesgo de una reacción global negativa”.
Otra especialista, Pilar Tavella, de Barclays, opinó que el proyecto de ley del programa económico plurianual que la coalición gobernante argentina enviará al Congreso a principios de diciembre podría ser “solo el primer paso” en una negociación con el FMI, según un informe elaborado por la entidad financiera.
El escenario base de Barclays es que el Gobierno cierre un trato a último momento, por lo que la posibilidad de cerrar un acuerdo técnico “aún está lejos”.