Las empresas Adecoagro, GDM (Grupo Don Mario) y Molinos Agro realizaron transacciones de semillas y reconocimiento de regalías extendidas mediante el intercambio de tokens de soja.
Adecoagro intercambió con GDM (Grupo Don Mario) tokens de soja por la compra de semillas y para el pago de regalías de uso propio; y Molinos Agro fue el acopiador en el proceso de la plataforma global de tokenización de commodities agrícolas de Agrotoken.
“Contar con el respaldo de tres compañías líderes del agro es un gran impulso para esta red que creamos”, destacó Eduardo Novillo Astrada, CEO & Co-Fundador de Agrotoken, quien aseguró que la plataforma “permite a los productores adquirir insumos y servicios con intercambio digital, confiable y transparente”.
Según Agrotoken, “GDM se caracteriza por tener un enfoque innovador y colaborativo trabajando con distintas organizaciones con la mirada puesta siempre en la evolución de la agricultura, por lo cual esta acción se ajusta perfectamente a su visión”.
Por su parte, Adecoagro fue la primera compañía en tokenizar su producción; y Molinos Agro tiene más de 118 años exportando productos de molienda de soja, girasol, trigo y maíz al mundo, siempre transformando la industria agrícola.
En la transacción, Adecoagro utilizó sus Agrotokens para el reconocimiento de la propiedad intelectual de GDM (regalía extendida) por el uso propio de sus variedades de trigo y la adquisición de semillas de maíz.
Agrotoken convierte cultivos reales en activos digitales a través de la tokenización, una “stablecoin” o criptoactivo estable con paridad en granos; por cada Token, hay una tonelada de granos real custodiada en un acopio que lo respalda, explican desde la plataforma.
Esta tonelada, a su vez, está validada por medio de la PoGR (“Prueba de Reserva de Granos”, por sus siglas en inglés), auditable en todo momento mediante la blockchain de Ethereum (el sistema que la gestiona).
Los Tokens Criptosoja (SOYA) y Criptomaíz (CORA) de Agrotoken son criptoactivos que tienen como valor de referencia al precio de los correspondientes granos en el mercado local donde se producen, que se pueden intercambiar por insumos o servicios, usar como garantía o acceder a otros criptoactivos, concluyen.