Powell ordenó una “comprensiva” examinación de las reglas éticas de la FED que comprenden las actividades de sus representantes de primera línea.
El presidente de la Reserva Federal estadounidense (FED), Jerome Powell, prometió hoy realizar una revisión de las reglas éticas de la institución, luego de revelarse que dos de sus directivos realizaran intercambios en la bolsa y con fondos de inversión atados a las mismas políticas de la entidad.
Powell ordenó una “comprensiva” examinación de las reglas éticas de la FED que comprenden las actividades de sus representantes de primera línea.
Esto sucede luego de que los presidentes de la FED de Boston y de Dallas, Eric Rosengren y Robert Kaplan, admitieran transacciones en la bolsa (divulgadas a través de la publicación de las declaraciones anuales de los doce presidentes regionales de la FED), y afirmaran la semana pasada que iban a vender sus activos antes del 30 de septiembre.
“La auditoria intentará identificar formas para reforzar estas reglas y estándares”, comunicó una vocera de la FED y agregó: “Cualquier cambio será añadido al Código de Conducta de la Reserva Federal”.
Pese a que ambos representantes señalaron que sus transacciones cumplían con las reglas éticas de la FED y que no existió conflicto de intereses, las críticas no tardaron en llegar: la senadora demócrata por Massachusetts Elizabeth Warren declaró en Twitter que los oficiales de la FED no deberían involucrarse en intercambios especulativos para “enriquecerse”.
“Ya lo he dicho antes y lo diré de nuevo: no debe permitirse que los miembros del Congreso y funcionarios de primera línea puedan intercambiar o apropiarse de acciones. Punto”, manifestó la senadora.
Warren luego dijo haber escrito a los doce presidentes regionales de la FED para instarlos a que en 60 días implementen medidas para prohibir la propiedad de activos entre los representantes de la entidad.
Las filiales regionales de la FED en los Estados son instituciones hibridas (privado-publicas), es decir, esto significa que pueden operar con menor escrutinio que el comité en Washington cuyos siete gobernadores son nominados por el Presidente y convalidados en el Senado.
La divulgación de las actividades de Rosengren y Kaplan ocurren en un momento donde la FED es criticada por algunas de sus políticas ejercidas durante la pandemia, las cuales elevaron de forma considerable los precios de los activos y, por lo tanto, beneficiando desproporcionalmente a los más ricos, señaló la agencia de noticias Bloomberg.
Asimismo, el sector progresista del Partido Demócrata rechazó que el presidente Jerome Powell sea nominado por el presidente Joe Biden para otro mandato de cuatro años (el actual vence en febrero próximo): la fracción demócrata reclama por mayor diversidad socioeconómica y racial en los representantes de la entidad monetaria.
Kaplan, exejecutivo del banco Goldman Sachs, poseía más de US$ 1 millón invertidos en bonos flotantes, atados e influenciados por las proyecciones y políticas de tasas de la propia FED, además de inversiones en Apple, Amazon y Delta Airlines.
En tanto, Rosengren invirtió en cuatro fondos de inversión de bienes raíces, y la revelación causó sorpresa ya que el propio Rosengren advirtió sobre los riesgos del comercio de bienes raíces.
“Me temo que los intercambios de Kaplan y Rosengren socavaron la legitimidad de la política de la FED, algo vital para el éxito de su legislación”, aseguró Peter Conti-Brown, profesor de estudios legales de la Universidad de Pennsylvania, a Bloomberg.
Hasta el momento los esfuerzos en el Congreso estadounidense para transparentar las operaciones de la FED fueron infructíferos: los bancos regionales de la entidad se negaron a cualquier modificación basándose en los beneficios de una estructura que, desde su fundación en 1913, previene al banco central de ser dominado por Wall Street o Washington.