Las renuncias presentadas por varios ministros y titulares de organismos que responden a Cristina Kirchner agrega fuerte incertidumbre entre los inversores. Los activos financieros sienten el impacto ante las dudas sobre el rumbo del Gobierno.
Las renuncias que varios ministros y funcionarios de alto rango pusieron “a disposición” de Alberto Fernández, abre un fuerte frente de conflicto en la coalición de Gobierno. En teoría se trata de un tiro por elevación para forzar un paso al costado de dos ministros claves y de máxima confianza del Presidente: el de Economía, Martín Guzmán, y el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero.
Guzmán participó hoy de un acto junto con Alberto Fernández, en la previa a la presentación del proyecto de Presupuesto 2022. Se trató de un gesto contundnete por parte del Presidente de confirmación del ministro de Economía en su cargo, en medio de rumores sobre su continuidad y la ofensiva del kirchnerismo para que dé un paso al costado. Inmediatamente después surgieron las renunciadas presentadas por el ministro del Interior, Wado de Pedro, el de Justicia, Martín Soria, el de Medio Ambiente, Juan Cabandié, pero también por Luana Volnovich (PAMI) y Marcela Raverta (ANSES), en todos los casos gente de extrema confianza de la vicepresidenta. A ellos se sumó el titular de Aerolíneas Argentinas, Pablo Ceriani.
Un importante politólogo realizaba la siguiente lectura en un mensaje a clientes: “Si el Presidente no cede a la presión y no entrega la jefatura de Gabinete y el control económico, el kircherismo parece dispuesto a romper la coalición, lo que llevaría a una debacle electoral y una posible crisis de gobernabilidad.
La fuerte disputa política que amenaza a la coalición oficialista se sentía en el precio de los activos argentinos, que el lunes tuvieron fuertes subas por la derrota del kirchnerismo. Las acciones argentinas que cotizan en Wall Street habían arrancado la jornada con subas, pero ahora caen en promedio alrededor del 3%. Los bonos también aflojaron y prácticamente volvieron a los niveles previos a las PASO, con el riesgo país de vuelta en 1.500 puntos básicos. El dólar también se hacía eco de estas fuertes presiones políticas y volvía a niveles de $ 185, tras haber bajado a $ 181 a principios de la semana.