“Nuestro resultado trimestral se vio inevitablemente afectado por la distorsión económica”, declaró el presidente y consejero delegado de Goldman Sachs, David Solomon.
Goldman Sachs registró un beneficio neto de 1.123 millones de dólares en los tres primeros meses de 2020, lo que representa un descenso del 48,5% en la comparación interanual, ante el efecto de la pandemia de coronavirus en la actividad del banco.
“Nuestro resultado trimestral se vio inevitablemente afectado por la distorsión económica”, declaró el presidente y consejero delegado de Goldman Sachs, David Solomon.
Solomon expresó su confianza en que una vez que se consoliden las medidas de contención implementadas por las autoridades para contener la pandemia, “la entidad estará bien posicionada para ayudar a la recuperación de sus clientes y comunidades”.
Entre enero y marzo de 2020, Goldman Sachs, en línea con el resto de grandes bancos estadounidenses, registró un fuerte aumento de las provisiones crediticias ante el deterioro del entorno económico, con un incremento de esta partida del 318% respecto del primer trimestre de 2019, hasta contabilizar 937 millones de dólares.
Por su parte, los ingresos netos del banco sumaron 8.743 millones de dólares, un 0,7% menos que un año antes, a pesar de la suba del 25% de su negocio de banca de inversión y del 27,8% en el segmento de mercados, así como del 21,5% en el área de consumo y patrimonio, según la agencia DPA.
Sin embargo, la actividad en gestión de activos registró un saldo negativo de 96 millones de dólares, frente a los ingresos de 1.793 millones de dólares del mismo periodo de 2019.