El acondicionamiento del metro cuadrado de oficina más caro de la region es el de la Ciudad de Buenos Aires, mientras que el de San Pablo se encuentra en segundo lugar.
Argentina tiene el metro cuadrado para oficinas más caro de América latina, seguido de Brasil, Chile, México, Colombia y por último Perú, de acuerdo con un relevamiento de CBRE, la principal empresa de servicios inmobiliarios del mundo.
En Buenos Aires para un escenario de diseño y equipamiento básico el costo va de 742 a 1.021 u$s/m2, para uno medio de 1.021 a 2.167 u$s/m2 y para el alto debe calcularse un valor que ronde los 2.167 u$s/m2.
Los costos están discriminados de la siguiente manera respecto al mercado argentino: 10% del total corresponde a soft cost (consultoría, profesionales arquitectos e ingenieros, permisos, etcétera), 60% se destina a hard cost (obra, costos de construcción) y 30 % a mobiliario.
Para la realización del informe se tomó como referencia una planta de 1.000 metros cuadrados que cumple con algunos supuestos. Entre ellos, que el edificio esté ubicado en el distrito de negocios de las principales ciudades del país y que sea de Clase A, que la locación se encuentre en buen estado y posea toda la infraestructura necesaria, que el diseño sea genérico y el mobiliario y el equipamiento nuevos. En esta línea, se tomaron tres estándares de valores de equipamiento: básico, medio y alto.
A nivel regional, Buenos Aires y San Pablo presentan costos similares –siendo el país tropical algo más económico–. Promediando los U$S 940 por metro cuadrado, Lima es la ciudad más económica para equipar oficinas con un estándar alto, siendo también la ciudad en la que el equipamiento de estándar básico es el menos costoso –cuesta U$S 535 por metro cuadrado–.
“Cada vez más, las empresas buscan implementar estrategias para que los lugares de trabajo sean amenos y no solo reflejen su ADN desde la estética, sino que se cree un ambiente laboral a partir de espacios diseñados según las características únicas de su modo de trabajo.”, explica Juan Esteban Zabala, director de Project Management Latinoamérica.
Para este año, el aprovechamiento de la tecnología para entender las necesidades corporativas sobre los lugares de trabajo y así mejorar el diseño de estos, ha impulsado un gran cambio en el negocio de su construcción. Esto sumado al hecho de que la fuerza laboral moderna ve la oficina no solo como un lugar de trabajo sino también como un espacio para conectarse, colaborar e inspirarse, por lo que la demanda de oficinas inteligentes también afecta la forma en que los propietarios definen lo que necesitan en un edificio.
Esta guía de costos para 2019/20 explora nuevas experiencias en las empresas, considerándolas como estrategias necesarias para atraer y retener a los mejores talentos, ofreciendo entornos que propician la productividad, donde los empleados están equipados de manera eficiente para centrarse en sus tareas.
“La base de un proyecto exitoso es el correcto armado del presupuesto inicial y es nuestro trabajo ser ese aliado que responda a las preguntas más comunes de nuestros clientes. En Argentina, a pesar del turbulento universo económico, el equipo de Project Management ha mantenido vigente una guía de costos para el fit-out de oficinas estándar bajo medio y alto como la herramienta de referencia ideal para responder a todas esas preguntas que se hacen en esta primera etapa”, concluye Ana González Ferrero, directora de Project Management Argentina.
